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Los teutones bailan tango

Cristina Papaleo y Märte Burmeister21 de junio de 2005

Argentina-Alemania: hoy se juega un clásico de la pasión de multitudes. Una cuestión de honor, también para una alemana y una argentina del equipo de DW-WORLD. Lea cómo se sacan chispas, anticipando el juego.

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El ánimo en alto para esta noche: Cristina Papaleo espera el triunfo argentino.

Es martes al mediodía, el sol arde en el asfalto. Como si asistieran a un duelo, matizado por risas y pelotazos, Cristina y Märte se preparan para un intercambio de ideas, sin saber aún quién ganará esta noche. La patada inicial la da Märte Burmeister, de local.

Alemania 1 : Argentina 0

"Desde que el irritable Rudi Völler dejó de ser entrenador, el equipo alemán se ha tranquilizado y parece haber econtrado el equilibrio. También los periodistas pueden quedarse tranquilos. Toda Alemania espera relajada. No por nada, Klinsmann es panadero, lo que indica que la victoria está "cocinada". Seguro que les hornea panes fresquitos todas las mañanas, con muchas vitaminas, para mantenerlos en forma. Además, Klinsi jugó en el equipo ganador del Mundial´, así que seguro sabrá cómo es eso de salir victorioso. El Kaiser también fue parte del éxito, primero como jugador del Mundial, y después como entrenador. ¡Y hasta hizo llorar a Maradona!"

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Märte Burmeister cree en una victoria alemana.Imagen: DW

Alemania 1 : Argentina 1

"El calor arrecia en tierras germanas, y el equipo celeste y blanco se enfrenta hoy a Alemania en la ciudad de Nüremberg. ¿Cómo nos portaremos hoy los argentinos en el Frankenstadion? Los muchachos defendieron la camiseta ante Túnez con un equipo que dejó algo que desear: más pasión, más de ese juego que nos gusta y al que estamos acostumbrados los argentinos, a pesar de que se ve a las claras que el equipo de Pekermann está buscando su identidad, y logra encontrarla a menudo con mucha claridad."

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Argentina-Alemania: en la DW se perfiló un empate.Imagen: DW

Alemania 2 : Argentina 1

"Sí, pero los jugadores alemanes son jóvenes, y seguramente ya saben quién son: Kuranyi, al menos, come siempre pan en la publicidad de un conocido dulce alemán. Así está claro que no va a tener ningún problema en el campo de fútbol. Y Podolski, menos que ninguno, ya su nombre suena a goles tan alemanes. Además, tenemos un nuevo arquero: Timo Hildebrandt, y el recién llegado Fabian Ernst. Yo diría que aquí la cosa ya se pone difícil para los argentinos. Timo suena parecido a Toni. Toni Schumacher, otro gran guardameta. Para colmo, no nos sentimos tan presionados, porque sólo necesitamos un punto. En cambio, ustedes tienen que ganar sí o sí. Entonces los nervios van en aumento, las piernas flaquean, ¡y uno patea fuera del arco!"

Alemania 2: Argentina 2

"En el partido de hoy se juegan muchas cosas, para los que vivimos acá: no sólo un partido, sino mucho más. Frente al televisor o en el estadio, la pregunta es: ¿qué se traerán los alemanes? ¿Nos sorprenderán, o podremos sorprenderlos? La fuerza y el equilibrio teutones contra el ritmo y la elegancia en el pase, eso es lo que me gustaría ver esta noche: Tango. Elegancia, pasión, inteligencia. Un juego donde Sorín se haga notar, donde Riquelme nos regale su mejor pase gol. La pelota entrando en el arco. En el arco alemán, claro."

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Entrenamiento frente al edificio de la DW, en Bonn.Imagen: DW

Alemania 3 : Argentina 2

"Miren que sabemos todo sobre ustedes. Tenemos hasta un espía suizo, un tal Urs Siegenthaler, que filmó a los jugadores y estudió las debilidades del equipo argentino, para determinar dónde está su talón de Aquiles. Pero por ahora no les cuento más. Puede ser que el calor arrecie en tierras germanas, y puede ser que los argentinos estén acostumbrados al calor, pero nuestros jugadores ya sufrieron el calor del 2003, así que no van a dejar de jugar bien por eso."

Alemania 3 : Argentina 3

"¿Podrá mostrar Argentina que estamos preparados para el Mundial 2006? El 3 a 1 con Brasil fue un lindo empujón, y nos recordó eso del orgullo, eso de jugar para ganar, sin soberbia, también sin Diego, sin la mano de Dios, pero con un Diego detrás de bambalinas, de algún modo siempre presente, y confiando un poco más en nosotros. Ese triunfo encendió una lucecita de esperanza para los que, como yo, vivimos en el exterior, y a quienes nos llegan triunfos y derrotas del equipo de una manera, tal vez, un poco distinta: con una felicidad algo exagerada al vernos triunfantes, y una tristeza exacerbada cuando el equipo no responde "como debería". ¿Típicamente argentino, eso de exigir, de exagerar en la exigencia? Mientras podamos cumplir con lo que prometemos, el resultado siempre será aceptable. Le exigimos mucho al equipo, y esta noche lo haremos otra vez.

En Argentina, algunos medios interpretaron la alabanza de Klinsmann, aquello de que "somos los mejores del mundo", como presión. Conociendo un poco a los alemanes, "Klinsi" lo dijo en serio: nos siguen considerando uno de los mejores equipos del mundo, uno de los grandes del fútbol. No los defraudemos."

Y se acabó el partido, pero sólo por ahora. Un final diplomático, y un deseo, entre líneas, de "que gane el mejor".