Lucía Topolansky: “Una actitud conciliadora”

¿Cómo definiría la personalidad de Lucía Topolansky?

Mujica la define muy bien: "Lucía es una especie de gota de agua de todos los días… Es de ese tipo de militante infatigable que genera luz propia de otra manera. Es la consecuencia… con forma de mujer y sin ella hay muchas cosas que no serían posibles”. Otra mirada, casi todas coincidentes, es la de Mario Teti, viejo militante del movimiento guerrillero MLN (Tupamaros) que compartió muchas horas de clandestinidad con ella: "No la volteas con sesiones del Parlamento que sean largas, que sean extenuantes, aguanta lo que sea… Le falta el casquito amarillo de obrero de la construcción”. Y ella misma acentúa que "se puede dejar de ser gobierno, senador o Presidente, pero no se puede dejar de militar. Lo que importa es la militancia”.

¿Cuáles han sido, brevemente, las etapas más importantes en la vida de Lucía Topolansky?

Uno: Hay como una impronta muy fuerte en su formación, que conjuga cierta educación familiar peculiar con otra más general. Su madre, María Elia Saavedra, estuvo un tiempo en Alemania y por ello fue un poco adelantada a su tiempo en cuestiones de género (priorizaba que sus hijos varones cocinaran y tendieran las camas y sus hijas fueran a estudiar); su tío Juan, hermano menor de su madre, poseedor de una gran biblioteca, en cuya estancia a orillas del río Yi pasaban todos los hermanos largas temporadas de verano, escuchando las lecturas del tío. Sus estudios secundarios con profesores devotos de la "utopía”. Dos:  Su ingreso al MLN, a partir del affaire de la Financiera Monty (entrega al MLN de documentación que probaba corrupción a alto nivel, n. de la R.) en la que ella trabajaba y su rápida inserción en el MLN. Tres: Sus años largos años de cárcel. Cuatro: la forma en que desde muy abajo va reconstruyendo su relación de pareja con Mujica y una nueva opción política a la vez. Quinto: es la primera mujer que asume como vicepresidenta de la República, no ahora, sino suplantando a Astori durante el gobierno de su compañero Mujica. Por último es importante advertir, y ella misma lo ha confesado algunas veces, que está enteramente al servicio político de las metas de Pepe Mujica, antes que cualquier otro objetivo.

¿Cuál ha sido su evolución política, después de su pasado guerrillero y su larga trayectoria en el Parlamento

Es bastante aceptado que ha tenido un desempeño sumamente correcto. Ha defendido con fuerza su sector y también las posiciones del Frente Amplio. Como que "la disciplina partidaria” ha sido su norte. No es una gran oradora ni nada que se le parezca, pero ha sido contundente en sus intervenciones. Parece ser que se destaca más en la labor en Comisiones, a la que le dedica mucho tiempo y trabajo personal, y como organizadora de su sector y bancada se la considera muy eficiente.

El MPP, del que fue fundadora Lucía Topolansky, pertenece al ala más izquierdista del Frente Amplio. ¿Ve también Lucía Topolansky la actual fase política en Uruguay como "acumulación de fuerzas hacia la revolución y el socialismo”?

En el plano teórico parece coincidir más con la actitud menos radical de las nuevas generaciones del MPP en relación con el materialismo histórico y la acumulación de fuerzas para la revolución. Lucía, el Pepe, y casi todos "los viejos” fundadores del MLN hace tiempo están también en una actitud más conciliadora entre las clases sociales, apuntando sobre todo a reducir la pobreza. Sería algo así como un batllismo (socialdemocracia. N. de la R.) del actual milenio, que parece satisfacer también al resto de los grupos y partidos que integran el Frente Amplio.

¿Qué papel político puede desempeñar Lucía Topolansky en lo que resta del actual periodo legislativo?

No va a tener grandes problemas, más bien lo contrario. Hasta las pocas voces de la oposición que se han manifestado hasta el momento lo ven como bastante positivo. Seguramente va a aplicar los reglamentos protocolares y demás con mucho rigor y exigencia dadas sus características. Hay unos cuantos miembros de su generación en el Ejecutivo, por lo que también será un buen nexo con el Legislativo. Y también con la oposición. Va a andar muy bien.

Cuando, en 2015, fue candidata a intendenta (alcalde) de Montevideo, sacó relativamente pocos votos. ¿Por qué?

Creo que hubo cierto cansancio de Mujica con la exagerada exposición mediática que el mismo llevó adelante. Se pasó de la raya y si bien él no se dio mayor cuenta de eso, creo que hasta ahora mismo, hasta sus propias bases se sintieron saturadas. Ambos, él y Lucía confiaron mucho en que eran el sector mayoritario y que casi con la militancia propia les alcanzaba y sobraba. Les fue mal y creo que todavía no han hecho una lectura atenta de ello, como que siguen con el "expediente viejo”. En esto último inciden mucho las constantes giras de Mujica por varios países del mundo, donde es aclamado por multitudes; en Japón por ejemplo, están verdaderamente alucinados con él. Pero en Uruguay su popularidad ha caminado en sentido contrario. 

El periodista e investigador uruguayo Nelson Caula es autor, junto con Alberto Silva, del libro “Ana, la guerrillera”, sobre Lucía Topolansky.

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