Más millones al rescate del euro: un respiro para Merkel y para Europa
29 de septiembre de 2011"Si el euro fracasa, fracasa Europa”: con este lema se ha batido la canciller alemana, Angela Merkel, las últimas semanas para convencer a la clase política y a la población de seguirla en su política a favor de la eurozona. Y el Parlamento alemán, el Bundestag, aprobó hoy con amplia mayoría (523 de los 620 votos) la ampliación y flexibilización del Fondo Europeo de Estabilización Financiera.
Con la población en contra
La ampliación -decidida en Bruselas el 21 de julio de este año pero que tenía que ser aprobada por los 17 Estados de la zona euro- ha sido causa de encendidos debates y agrias acusaciones en la escena política alemana. También en la población: según las estadísticas, la crisis financiera es el núcleo de su preocupación, y casi el 70 por ciento de los ciudadanos está en contra de mayores ayudas a los países afectados por la crisis financiera.
La ampliación aprobada significa para Alemania un mayor desembolso, 211.000 millones de euros en vez de los 123.000 actuales. En total, el fondo prevé un monto de 440.000 millones de euros para créditos a países en crisis y para accionar en la compra de deuda soberana; también incluye garantías estatales por 780.000 millones de euros.
Todos los fantasmas en escena
El debate de las últimas semanas ha incluido una amplia gama de temas: desde el por qué y la función de un fondo que rescate a países en quiebra hasta el futuro mismo de la Unión Europea.
El péndulo de los discursos ha oscilado entre el efecto dominó que podría desencadenar la exclusión de un miembro de la moneda única y el menoscabo de soberanía nacional que podría significar ceder competencias presupuestarias y financieras a Bruselas.
También han sido tema de debate la evolución del europeismo, el rol del sistema financiero internacional en esta crisis, el rol de Alemania como economía principal de Europa. Y, no por último, el futuro inmediato de la canciller alemana, pues no estaba clara la aprobación de esta medida que pesará sobre las espaldas del contribuyente alemán en las próximas generaciones.
No ganaron los eurorebeldes
La fractura del bloque de coalición liberal/conservadora había quedado en evidencia a más tardar cuando el propio ministro alemán de Economía, Philipp Rösler, comenzó a hablar de la posibilidad de una “insolvencia ordenada” para Grecia en contra del discurso de la canciller. No obstante, el día decisivo, el joven ministro se declaró a favor de “crear confianza en Europa” y el bloque liberal/conservador acabó guardando las espaldas de la canciller. Al final en las filas de los “eurorebeldes” hubo sólo 19.
Los defensores de la medida, por su parte, no se cansaron de subrayar que de la estabilización de la eurozona actual depende la salud de la economía alemana, basada en la exportación; el bienestar de la población alemana depende del euro, se encargaron de recalcar algunos parlamentarios. Por ejemplo, el jefe de la fracción parlamentaria del bloque cristianodemócrata, Volker Kauder: "Tenemos un interés nacional existencial en la estabilidad de Europa y del euro".
Verdes y socialdemócratas también apoyaron la ampliación del fondo. Peer Steinbrück –ex ministro de Finanzas de la anterior coalición gubernamental- si bien criticó la política de pequeños pasos del actual Gobierno de Berlín que no ha aportado a la confianza- anunció su voto a favor recalcando las ventajas de Europa: bienestar, libre circulación, libertad de expresión y, no por último, paz.
¿Y Bruselas?
"Nos encontramos en una situación excepcionalmente difícil, pues el nerviosismo en los mercados financieros amenaza a la economía real. Por ello es recomendable que tomemos conciencia de nuestra responsabilidad”, decía el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, abogando a favor de la ampliación del fondo y también, en un sentido más amplio, por toda medida europea que aporte a la estabilidad del euro.
Y la expresión de satisfacción y alivio en Bruselas no se hizo esperar. Poco después de terminada la votación en la cámara baja del Bundestag –que es la décima de las 17 necesarias- el portavoz del comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn decía: “por supuesto que estamos satisfechos y celebramos esta nueva aprobación y ratificación".
Autora: Mirra Banchón
Editor: Enrique López