Maria Reiche, la alemana más admirada del Perú
Nacida el 15 de mayo de 1903 en Dresde, Maria Reiche está considerada como la máxima experta en las Líneas de Nazca: los enormes geoglifos con formas de animales representados en el desierto entre Palpa y Nazca, en Perú.
Cumpliendo un sueño
Ya de bien pequeña Maria Reiche tenía claro qué quería ser de mayor: investigadora. Nacida el 15 de mayo de 1903 en Dresde, la alemana dedicó buena parte de su vida al estudio de las Líneas de Nazca, tratando de desentrañar el misterio de esos enormes geoglifos con formas de animales o de seres humanos.
Admiradora del pasado peruano
Reiche viajó a Cuzco en 1932, donde permaneció durante tres años, dando clases a los hijos del cónsul alemán. En ese período, la joven arqueóloga peregrinó hasta Machu Picchu. Regresó a Alemania en 1936, pero la situación política, con el régimen de Hitler, la hace a volver a Perú. En 1941, viajó a Nazca con el arqueólogo Paul Kosok, abriéndose así su apetito por la investigación.
Patrimonio de la Humanidad
Gracias al trabajo de Reiche, las Líneas de Nazca son Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Estos gigantescos dibujos, que pueden observarse en su máximo esplendor desde el aire, fueron creados por la cultura nazca. Según las investigaciones de la alemana, se trataba de un calendario astronómico que relacionaba la posición de los astros con las cosechas y las estaciones del año.
Razón de vida
Reiche fue la descubridora de los diseños de “El mono” y “La araña”. Teniendo en cuenta el valor de estos hallazgos, la alemana se fue a vivir cerca de las líneas y empezó a luchar para conservarlas. En 1992, Reiche recibió la nacionalidad peruana. “El tiempo será poco para estudiar la maravilla que encierran las pampas de Nazca”, dijo en una ocasión. Murió en 1998 en Perú, atenta a sus líneas.
Líneas amenazadas
Las Líneas de Nazca afrontan actualmente amenazas que van desde las catástrofes naturales, como El Niño o el calentamiento global, así como situaciones inesperadas, como la acción de Greenpeace de diciembre de 2014. El cartel estaba dirigido a los líderes que participaban en la cumbre sobre cambio climático de la ONU (COP20) en Lima para promover el fin del uso de los combustibles fósiles.
El reto de la conservación
El reconocimiento a la alemana se palpa tan solo aterrizar en la ciudad de Nazca, cuyo aeropuerto lleva su nombre, al igual que una importante avenida de la ciudad. Las Líneas de Nazca han potenciado el turismo en Perú y en la zona que, en 2013, contó con más de 167.000 de visitantes. A pesar de ello, hay poca inversión estatal para su conservación, lamentó el arqueólogo peruano Jonhy Isla.
Descubriendo el misterio
Isla (a la derecha) visitó Bonn (Alemania) con motivo de la exposición sobre la cultura nazca que alberga el Bundeskunsthalle. Junto a Markus Reindel, del Instituto Alemán de Arqueología de esta ciudad, ha llevado a cabo nuevas investigaciones sobre los geoglifos de Nazca, que resultaron ser "espacios sagrados de índole religioso que se usan para llevar a cabo cultos y ofrendas", aclaró a DW.