Misión en el espacio
7 de julio de 2006Dos días después de haber despegado, el Discovery se unió cuidadosamente a la estación en una delicada danza espacial que se realizó mientras se desplazaban juntos a 28.000 kilómetros por hora, 357 kilómetros sobre el Océano Pacífico.
Dos horas más tarde, las escotillas que unían al Discovery y la Estación ISS se abrieron y los siete miembros de la tripulación del trasbordador se deslizaron a través de túneles hacia donde estaban el comandante de la estación, Pavel Vinogradov, y el ingeniero de vuelo, Jeffrey William, para darles la bienvenida.
La agencia esapacial estadounidense NASA espera realizar 16 misiones de trasbordadores para completar la estación, antes de que las naves que ha usado desde 1981 queden obsoletas.
Maniobras en el espacio
La tripulación del trasbordador entregará más de 2.272 kilos de equipos y suministros a la estación antes de su partida, prevista para el 14 de julio. El Discovery también dejará en la estación al astronauta alemán Thomas Reiter, quien permanecerá en ella por un período de seis meses.
Además, se realizarán al menos dos caminatas espaciales para reparar un sistema averiado que se necesita para completar la construcción de la estación, de 100.000 millones de dólares
Antes del acoplamiento, el trasbordador fue maniobrado con un lento giro hacia atrás mientras desde la estación se fotografiaban las lozas resistentes al calor sobre la panza de la nave, que la protegen durante el retorno a la Tierra.
Sin contratiempos
Funcionarios de la NASA esperan que la ausencia de fallas haya resuelto el problema de desprendimientos de espuma protectora, que en 2003 causaron el desastre del Columbia. Los mismos problemas se produjeron en el primer vuelo llevado a cabo después del accidente, durante el verano boreal pasado.
"Hasta ahora no hay preocupaciones", dijo el director de vuelo Tony Ceccacci. "Estoy muy contento por como están saliendo las cosas", agregó. Otro contratiempo serio podría dejar en tierra permanentemente a la flota de trasbordadores anticipando su retiro planeado para el 2010.
Ello implicaría que la construcción de la estación espacial, que depende de los trasbordadores y que ha estado en suspenso desde el desastre del Columbia, podría quedar inconclusa.
Unos pocos trozos de espuma, que aísla los tanques de la formación de hielo, se desprendieron durante el ascenso del Discovery el martes. Sin embargo eran mucho más pequeños que los pedazos de 756 gramos que causaron un agujero en la placa protectora del ala del Columbia.
Ingenieros de la agencia espacial dijeron que sensores y cámaras han captado varias posibles marcas de impactos en el trasbordador durante el despegue, pero ninguna genera demasiadas preocupaciones por el momento.
La sombra del Columbia
El Columbia se desintegró mientras regresaba a la Tierra porque su escudo protector dañado permitió el paso de gases candentes a su estructura. Los siete astronautas a bordo murieron. Desde entonces, la NASA ha gastado 1.300 millones de dólares en mejoras de seguridad para prevenir otro desastre.
Así, la llegada del alemán Reiter a la estación marca la primera vez que esta logra contar con una tripulación completa de tres personas desde mayo del 2003. La tripulación se redujo a dos después del desastre del Columbia para ahorrar suministros.
Reiter, que previamente pasó seis meses en la estación espacial rusa Mir, también será el primer residente de la estación que no es estadounidense o ruso. Williams y Vinogradov han estado en la estación espacial por 99 días.