Mordillo, en el paraíso de la caricatura
Guillermo Mordillo, dibujante humorístico argentino, conquistó el mundo entero con sus personajes desde los años 60. El caricaturista de las narices grandes falleció el 30.06.2019 en Mallorca, España.
Mordillo, en el paraíso de la caricatura
El dibujante argentino Guillermo Mordillo, que cosechó un gran éxito en Europa, falleció el 30.06.2019, a los 86 años, en la isla española de Mallorca. Sus dibujos estaban impregnados de un humor negro que él definía como "la ternura del miedo". Mordillo nació en Buenos Aires en 1932, el mismo año que su compatriota Quino y que el francés Sempé, con quienes se lo comparaba.
Guillermo Mordillo
Guillermo Mordillo y Meléndez nació en Buenos Aires el 4 de agosto de 1932, como hijo de inmigrantes españoles. Cuando era apenas un niño, decidió convertirse en dibujante. A la edad de 14 años, se graduó de la escuela, luego obtuvo su maestría e ilustró libros infantiles a la edad de 18 años.
La búsqueda de la pasión
Después de trabajar en una película de animación, en calidad de director de arte de una agencia de publicidad, Mordillo diseñó figuras para tarjetas de felicitación. Figuras que fueron predecesoras de sus famosos personajes, con los que el argentino logró un gran éxito en la década de 1960 en Francia.
Cuando no se habla francés, es mejor callar
Luego de vivir en Lima y Nueva York, Mordillo se fue a París en 1963, sin hablar francés. Por eso sus figuras se quedaron mudas. Sus motivos no tienen fronteras lingüísticas y, por lo tanto, son universales. Su primera caricatura apareció en la revista "Pèlerin" en 1966. A partir de entonces, las narices grandes se convirtieron en la marca registrada del dibujante.
Ni nombre ni orejas
Las figuras de Mordillo también comparten otras características: no tienen nombre ni orejas y usan peinados idénticos, a menudo tienen los ojos abiertos y su boca sólo es visible cuando está abierta. El artista lo describió como "simbólico para el ser humano".
Inspirado en los 7 enanitos
Mordillo se inspiró en el cine. Cuando era niño vio a "Blancanieves" y quedó tan impresionado por las narices de los siete enanitos que luego las adoptó en su trabajo.
Animales grandes
El repertorio del argentino incluye también animales grandes, preferentemente vacas y jirafas. Mordillo utiliza acuarelas, tinta, pastel y acrílico en sus obras.
Sin salida
Las figuras de Mordillo se encuentran a menudo en situaciones aparentemente sin salida, pero, a pesar de todo, se comportan con dignidad. El artista combina la ternura, la esperanza y el deseo de sacar lo mejor del momento, por dramático que sea.
Basta una mirada
Mientras sus figuras son incoloras, están rodeadas de fuertes colores en la mayoría de sus obras. Los momentos se reducen a lo esencial: una mirada es suficiente para transportar la atmósfera en la que se mueven sus héroes.
Más difícil de lo que parece
Guillermo Mordillo fue invitado a la Feria del Libro de Frankfurt en 2012. Allí dibujó y pintó una jirafa con la típica nariz. "Nada en mis caricaturas es espontáneo, trabajo milímetro por milímetro, y necesito mucho tiempo", dijo.
Originales bajo llave
La comercialización de sus productos es interminable: además de caricaturas hay libros, calendarios, carteles, animales de tela y rompecabezas con figuras de Mordillo para comprar. El artista no vendía sus originales, los conservaba en una caja fuerte del banco.