"No sacrificar los derechos humanos"

La Unión europea criticó duramente la situación de los derechos humanos en Colombia y apeló a todas las partes a dirimir las diferencias existentes a través de la negociación política. Con motivo de la toma de poder del nuevo presidente, Alvaro Uribe, la UE afirmó que sólo el diálogo puede instaurar una paz duradera.

En un comunicado difundido el miércoles, la presidencia danesa de turno en la UE condenó la campaña de intimidación de que han sido objeto alcaldes y concejales municipales por parte de la guerrilla. "Este tipo de actos significan una violación inaceptable de las libertades individuales a nivel local, que socavan la credibilidad de las instituciones democráticas," señala el documento.

Campaña de terror

Más de 100 alcaldes colombianos han renunciado a sus cargos presionados por las amenazas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC.

El diario alemán Sueddeutsche Zeitung publica en su edición del martes una entrevista con Libardo Erazo, alcalde de la localidad de Colón, departamento de Putumayo, al sur del país, quien tuvo que dimitir obligado por la guerrilla. Las FARC tuvieron a su hija de tres años secuestrada durante 15 días, a pesar de que Erazo ya había dimitido; con ello la guerrilla quería sentar un ejemplo de dureza.

Desde la dimisión de Erazo la alcaldía fue cerrada y la administración pública quedó paralizada. El caso ejemplifica la macabra campaña contra las autoridades locales colombianas.

Volver al diálogo

Los quince países de la UE subrayan la trascendencia del compromiso de Uribe de mantener un diálogo entre el Gobierno y los grupos armados ilegales, una vez que existan las condiciones necesarias para restablecer la negociación política.

La UE apoyará sin reservas los esfuerzos del nuevo Gobierno para poner fin a la impunidad, y destaca la importancia del sistema de justicia, para enjuiciar a los autores de crímenes y violaciones a los derechos humanos.

La presidencia danesa apela al nuevo gobierno colombiano a poner especial atención a las reformas sociales y económicas, en el esfuerzo por encontrar una solución duradera, y reitera el apoyo de la UE al gobierno de Bogotá, en la planificación e implementación de dichas reformas.

Espiral de violencia

Por su parte la organización pro-derechos humanos, Amnistía Internacional, exhortó a Uribe a priorizar la preservación de los derechos humanos. "Con tristeza se ha observado como una y otra vez los gobiernos de Colombia han sacrificado los derechos humanos en nombre de la seguridad y del combate al terrorismo", dijo un portavoz de la organización desde su sede en Lausana, Suiza.

La organización envió una carta al presidente colombiano en la que le advierte que toma posesión en un momento en el que se registra un lamentable deterioro de los derechos humanos. "Millones de personas padecen cotidianamente las consecuencias de la violencia política. Las violaciones a los derechos humanos están a la orden del día como resultado del enfrentamiento entre grupos armados. Usted tiene en sus manos la posibilidad de mejorar los derechos básicos individuales en su país," afirma el comunicado.

Alvaro Uribe ganó los comicios presidenciales en mayo pasado, con un 53% de los votos, sobre todo por su promesa de instaurar una política de mano dura contra los grupos armados del país, principalmente contra la guerrilla. Amnistía Internacional afirma que "en vez de mano dura, lo que el país necesita es una política que proteja y garantice los derechos civiles de todos sus ciudadanos."