No todo lo que brilla es Hollywood

En la ciudad de Hannover, Baja Sajonia, se concibió y planeó esta película de animación digital, la primera de producción totalmente alemana, que se estrena el 18 de marzo. Su eslogan es: "Una Indiana Jones para niños con la técnica de Toy Story y los guionistas de A Bugs Life." Su director es Lennard Krawinkel, y los costos de producción estarían muy por debajo de los que acostumbra Hollywood.

Sin embargo, también participan figuras internacionales como Bob Shaw y Don McEnery, autores de 'A Bugs Life' y 'Hércules', el músico Mousse T., y John Chatwick, de LucasArts. Michael Herbig y Vanessa Petruo, la ex 'No Angels', le dieron voz a los personajes. Según el director, al proyectar esta película le fascinó la idea de poder competir con Hollywood contando con mucho menos presupuesto, pero con una técnica con la cual se lograrían los mismos o mejores resultados.

Aventuras de pequeños en el reino de los grandes

Gaya es un reino fantástico, con paisajes paradisíacos, cuyos habitantes, los gayanos, son de tamaño ínfimo, pero poseen hábitos muy similares a los de sus homólogos terráqueos. En realidad, los gayanos son los héroes de la serie de televisión 'La aventuras de Buu y Zino', sólo que antes de que su creador pudiera escribir el capítulo 234, los personajes desaparecen de la pantalla y se sumergen en el mundo real. Esta vez la aventura los lleva a intentar recuperar la piedra mágica, llamada 'Dalamita'.

Sin el cristal encantado, el mundo de Gaya se precipitaría a un horroroso final. El Profesor N. Icely quiere obtener la piedra para sus oscuros fines, y al tratar de transportarla, también algunos gayanos se cuelan a través del hoyo virtual, aterrizando, pues, de este lado. Pero Buu y Zino, compañeros de aventuras al mejor estilo 'Toy Story', miden sólo 30 centímetros en el mundo real. Zino es el impetuoso y apuesto, mientras que Buu es el prototipo del miedoso e inteligente 'cuatrojos'. Los acompañan la hermosa princesa Alanta y los tres Schnurks, los 'malos' que siempre pierden frente a Buu y Zino.

¿Nada que envidiar a Hollywood?

Esta película, que llevó cuatro años de producción, no presentó problemas de realización en cuanto a la técnica, pero sí fue un desafío financiarla, dado que la intención de medirse con las grandes fábricas de imagen digital hollywoodenses les pareció muy audaz a los inversores. Visualmente, 'Back to Gaya' no tiene nada de qué avergonzarse, más aún cuando sus personajes, muy bien logrados, son figuras con rasgos humanos, y no peces, afirman los críticos.

Sin embargo, en el film sobraría buena voluntad y faltaría argumento. El encanto del anárquico 'Shrek' y la conmovedora historia del padre y el hijo en 'Buscando a Nemo' dejan en el espectador la marca inconfundible de Hollywood. En cuanto los pequeños gigantes de Baja Sajonia, parece que no llegarían a alcanzar altura propia. A pesar de ello, la película, que seguramente entusiasmará a chicos y grandes, y los dejará atónitos con un final más que inesperado, significa un paso adelante en la animación digitalizada en Alemania.