Nueva línea de metro de Londres: una obra con tecnología alemana
Excavar un túnel bajo el Támesis en Londres para una nueva línea de metro es un desafío técnico y financiero. La obra, con tecnología de Alemania, está a punto de concluirse.
El costoso túnel del Támesis
Dos de las ocho máquinas perforadoras, con un precio de unos 11.227 millones de euros cada una, son de fabricación alemana. Cada una tarda aproximadamente una semana en excavar 100 metros de túnel bajo el río de Londres. Cada megamáquina de estas necesita 20 trabajadores para su operación, 24 horas al día.
Un desafío técnico y financiero
Representantes de 50 ciudades de todo el mundo vinieron a Londres para descubrir cómo los londinenses lograron financiar 11 mil millones de euros para una nueva línea de metro. Pero los expertos también estaban interesados en estudiar la tecnología empleada por los británicos, no solo en la construcción adyacente a un campo de fútbol en Stepney Green.
Una ruta complicada
Después de dos años de planificación, los ingenieros pudieron determinar la ruta óptima. Los túneles ya existentes debían ir por debajo o cruzarse en 26 puntos. Al recorrido se sumaron 42 nuevos kilómetros de túnel, cada uno con un diámetro de siete metros. La parada de la estación de Liverpool se convierte ahora en una importante estación de metro que conecta tres líneas.
Aportes de los contribuyentes y el sector privado
La Reina ya visitó la parada de Bond Street, la línea que llevará su nombre. Tramos de esta ruta se abrirán en mayo de 2018, y a partir de diciembre funcionará por completo. El dinero para esta ruta proviene de ingresos fiscales y ventas de pasajes, así como de aportes del sector privado.
Visión de futuro
Se estima que aproximadamente 200 millones de pasajeros al año utilicen la nueva ruta, en la cual se construyeron diez nuevas estaciones, como la de Canary Wharf, la primera en terminarse. Entonces, el trayecto entre Wharf en el este de Londres, y el aeropuerto de Heathrow, en el oeste, llevará 40 minutos. Ahora son 67 minutos.
Una estación acuática
La estación de Canary Wharf tiene 250 metros de larga y se construyó 18 metros por debajo del muelle de West India Quay. Toda la estación está rodeada de agua y tiene un techo con estructura de madera de 310 metros de largo. Unos 40 millones de personas pasan por Canary Wharf cada año. Autor: Michael da Silva (jov/vt)