Obama advierte que abismo fiscal sería “un castigo”
29 de diciembre de 2012
Si no se ponen de acuerdo, el 1 de enero de 2013 podría marcar el inicio de una recesión estadounidense que arrastrará al resto del mundo. Todo porque en esa fecha comienza a regir un paquete de medidas extraordinarias que busca evitar una suspensión de pagos de hasta dos meses, según cálculos del Tesoro de Estados Unidos.
Es el llamado “abismo fiscal” al que tanto temen los analistas. Se trata de un aumento generalizado de impuestos, el fin de las prestaciones para dos millones de desempleados y fuertes recortes en el gasto. Todo porque el 31 de diciembre de 2012 el gobierno de Barack Obama alcanzará el tope de deuda de 16,3 billones de dólares, situación que activa estas medidas extraordinarias.
En su discurso semanal a los estadounidenses de este sábado (29.12.2012), Obama advirtió de las consecuencias económicas que tendría el “abismo fiscal”, entre ellas el recorte de 600 mil millones de dólares en gasto. Si eso ocurriera, "sería algo negativo para nuestra coyuntura. Simplemente no nos podemos permitir un castigo político a nuestra economía", consideró Obama. A su juicio, la recuperación desde la última recesión está en peligro.
La principal barrera para alcanzar un acuerdo sigue siendo el límite de ingresos anuales sobre los cuales se pagarán impuestos. Para los demócratas, quienes ganen más de 250 mil dólares al año deben pagar. Para los republicanos, esa cifra debe ser de 500 mil. En el período de negociaciones, se espera que los republicanos se bajen a 400 mil y pidan, a cambio, menos impuestos estatales.
Como sea, el tiempo apremia y los congresistas lo saben. Este sábado (29.12.2012) se instalaron en sus oficinales en el Capitolio para seguir en conversaciones. El Senado tiene previsto celebrar una inusual sesión el domingo (30.12.2012) a partir de las 13:00 hora local (18.00 GMT), pero no está claro si se reunirá la Cámara de Representantes.
Autor: Agencias
Editor: Diego Zúñiga