OMC: EEUU y Europa ya no dan la tónica
19 de diciembre de 2005El matutino FRANKFURTER ALLGEMEINE ZEITUNG, de Fráncfort del Meno, opina: "El resultado es fruto de un maquillaje. La Organización Mundial del Comercio había excluido de antemano algunos puntos controvertidos, para evitar un colapso como el de hace dos años en Cancún. Pero el truco no modifica el hecho de que la OMC se halla en falsa escuadra. No sufre tanto por ser impopular ni por despertar temores y protestas como símbolo visible de la globalización. No, a la OMC no la paralizan las críticas de afuera, sino las discusiones internas. Los tiempos en que EEUU y Europa daban la tónica pertenecen al pasado. Tres cuartas partes de los Estados miembros de la OMC son hoy países en desarrollo. Los intereses están hoy más repartidos y ello en una organización que decide todo por consenso".
Un sabor amargo
El diario BASLER ZEITUNG, de Basilea, Suiza, comenta: "Un sabor amargo deja que los países ricos puedan seguir aplicando aranceles aduaneros a productos llamados sensibles. No se fijó fecha para acabar con esa excusa. Y actualmente no se puede predecir si la futura limitación de la flexibilidad en el sector de servicios será positiva o no para los países en desarrollo. Visto de tal forma, Hong Kong deja mucho que desea."
Los tratados son como choricitos
THE TIMES, de Londres, editorializa: "Los tratados mundiales de comercio son como choricitos: lo mejor es ni enterarse de qué llevan dentro. Ello vale sobre todo para las maratonianas negociaciones en Hong Kong, que terminaron con un esbozo de acuerdo. La combinación de falta de sueño de los delegados en la sala de conferencias con las protestas a voz en cuello, pero sin sentido, de los 'campesinos' surcoreanos en las calles no fue bonita. El texto final podría haber contenido más buenas ideas y mostrar más la senda hacia el futuro. Pero es sensato no contraponer lo mejor a lo bueno. Como insistieron los ministros de Comercio de Australia y la India, aquí se logró dar un paso adelante y llegar a un acuerdo que vale la pena conservar."
Nadie piensa en los demás
El diario LIBÉRATION, de París, escribe: "En negociaciones como las de la OMC en Hong Kong nadie piensa en los demás, sino sólo en sí mismo. (...) Al ultraliberalismo se le aguaron un poco las posiciones. No obstante, la conferencia de Hong Kong siguió una lógica liberal. Algunos llegaron a soñar con una especie de liberalismo social. El presidente de la OMC, Pasca Lamy, lo impuso. Ahora queda por aclarar una cuestión: ¿Qué interrelación existe entre el compromiso de Bruselas, en el que Blair cedió a las exigencias de Chirac aparentemente sin contraprestación, y el de Hong Kong, en el que Francia levantó tan rápidamente su anunciado bloqueo, que incluso la Federación de Agricultores (FNSEA), que generalmente sigue a Chirac, está ahora enojada?