ONU condena asesinato de civiles en Turquía
1 de febrero de 2016
El Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, Zeid Ra'ad Al Hussein, instó este lunes (1.2.2016) a Ankara a investigar el presunto asesinato de un grupo de personas desarmadas en la ciudad turca de Cizre. La semana pasada se hicieron públicas las imágenes grabadas por el periodista turco Refik Tekin en las que se ve cómo un grupo de civiles desarmados, liderados por un hombre y una mujer con banderas blancas, son acribillados por un vehículo militar blindado.
El funcionario de las Naciones Unidas expresó en un comunicado su preocupación por el camarógrafo, quien resultó herido durante el tiroteo y será detenido cuando salga del hospital para enfrentar una pena de prisión “extremadamente dura”. Documentos firmados por un gobernador y un fiscal acusan al reportero de formar parte de un “grupo terrorista separatista”. La habitación de Tekin en el hospital Estatal de Mardin está custodiada por un policía. “Filmar una atrocidad no es un delito”, señaló Al Hussein.
“Pero disparar contra civiles desarmados sin duda lo es”, acotó este representante de la ONU, subrayando la importancia de que se investiguen exhaustiva, independiente e imparcialmente de este y otros eventos en donde se ha herido o matado a civiles. “La aparición de este video plantea importantes interrogantes acerca de qué es exactamente lo que sucede en Cizre y otros lugares del sudeste de Turquía, que las autoridades turcas habían declarado aislados del mundo exterior”, añadió el alto comisionado.
Aunque reconoció la dificultad del Gobierno para ejercer su deber de proteger a la población de la violencia en el sudeste del país, Al Hussein indicó que eso no exime al Ejecutivo de “defender en todo momento los derechos humanos cuando llevan a cabo operaciones militares”. La instancia bajo su dirección ha recibido numerosos informes que reflejan el deterioro de la situación de los derechos humanos en esa región de Turquía, sobretodo en Cizre, Silopi, Sur y la ciudad de Diyabakir.
En Cizre rige el toque de queda desde mediados de diciembre. El Ejército turco está librando una ofensiva contra el proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en el sureste del país. Según el International Crisis Group, desde julio murieron en ese conflicto al menos 243 miembros de las fuerzas de seguridad. El PKK ha informado por su parte de 257 bajas entre sus filas. En Diyabakir, la imposición de numerosos toques de queda restringen considerablemente los derechos económicos y sociales de la población.
Al Hussein dijo además que el caso de Refik Tekin acentúa su “ya marcada preocupación” por el tratamiento que reciben los periodistas en el país. “Turquía cuenta con una cifra alarmante de periodistas condenados o en espera de juicio, lo que hace cuestionar la libertad de expresión del país”, dijo el alto comisionado. “Nadie debería pagar una condena a cadena perpetua por escribir artículos, como es el caso de Can Dündar o Erdem Gül. Ningún periodista debería ser detenido por ejercer su profesión”, enfatizó el funcionario de la ONU.
ERC ( EFE / dpa )