Opinión: Lahm, camino a la cima
8 de febrero de 2017La determinación y la coherencia siempre han marcado a Philipp Lahm a lo largo de toda su carrera. No importaba si se trataba de denunciar públicamente los problemas en el FC Bayern, de defender su derecho a la capitanía de la selección nacional o cualquier otro tema. Aunque a veces tropezase, ahora el capitán del Bayern se mantiene fiel a su última decisión en lo que se refiere a su carrera deportiva. En concreto, la de saber cuando dejar las botas.
Al igual que cuando anunció su retirada de la selección nacional tras la victoria en el Mundial de Brasil, Lahm consiguió algo que algunos de sus predecesores, como Lothar Matthäus, Stefan Effenberg y Michael Ballack no supieron hacer. Lahm se marcha voluntariamente y convencido, en un momento en el que muchos lamentan que no continúe una o dos temporadas más. "Me gustaría seguir más tiempo con él en el campo”, manifestó Manuel Neuer, "pero es su decisión personal y lo acepto”.
¿Sucesor de Rummenigge?
El nivel deportivo de Lahm sigue siendo sobresaliente. Sin duda, lo suficientemente bueno para dominar el juego del Bayern todavía un par de años. Quizás no baste para conservar la difícil posición del lateral derecho, pero sí podría cumplir la función de volante defensivo, una posición que quedará libre tras la salida de Xabi Alonso en el verano. Lahm ya jugó en ese puesto bajo el mando de Pep Guardiola y convenció. Sin embargo, ya no quiere seguir jugando y tiene otros planes.
En primer lugar, Lahm quiere tomarse un descanso, una decisión inteligente en lugar de ir dando vueltas de cargo en cargo. Aunque así perderá la oportunidad de ocupar el puesto vacante de director deportivo el FC Bayern, podría ponerse en mejor posición para llegar cargos más altos. El contrato de Karl-Heinz Rummenigge como presidente del Múnich termina en 2019. Para esa fecha Rumennigge tendrá casi 64 años, un buen momento para entregar el relevo. Entonces, Lahm ya debería estar lo suficientemente recuperado como para ocupar un alto cargo en la directiva o en la presidencia del Bayern.
¿Quizás como director? ¿Un director de tan solo 35 años? Muchos consideran probable esa posibilidad. Un movimiento que encajaría perfectamente con la ambición de Lahm y la coherente planificación de toda su carrera.