Ortega: candidato sandinista a reelección en Nicaragua
5 de junio de 2016Celebrado en Managua, el congreso nacional del gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) ratificó la candidatura presidencial del exguerrillero marxista de 70 años, quien gozará de la facultad para elegir a su compañero de fórmula. Más de mil delegados proclamaron a mano alzada la nueva candidatura del líder Sandinista en la plaza de los No Alineados "Omar Torrijos Herrera", contigua a la Asamblea Nacional (parlamento), en el antiguo centro de la capital. 17052723
No a la observación internacional
Durante el acto Ortega volvió a rechazar la participación de observadores internacionales en las elecciones, como una demanda de la oposición que pide garantías de transparencia y credibilidad en el proceso.
La observación nacional y extranjera ha sido establecida en la Ley Electoral y una constante desde 1990. Pero antes de su nominación, el presidente nicaragüense criticó a los observadores electorales de la Organización de Estados Americanos (OEA), de la Unión Europea (UE) y a los "yanquis", en alusión a los Estados Unidos, porque, a su juicio, sólo se pronuncian en procesos de los países donde no tienen "su dominio".
"Aquí se acabó la observación", sentenció el gobernante, quien la emprendió contra los embajadores, sin mencionar de que países, por llamar a los árbitros electorales y a diputados para pedir cuentas sobre las elecciones generales. "Vayan a poner orden en sus países" que sufren altos niveles de violencia, delincuencia y racismo, advirtió.
Sobre el tema, la disidente sandinista y exdiputada Dora María Téllez, dijo en las redes sociales que Ortega estaba "dando sombrerazos a ver quién se espanta". Se trata, agregó, de " una vieja mañana que ya no da resultado".
Líder indiscutible del FSLN
El congreso nacional del FSLN aprobó por "unanimidad" la continuidad de la "política de alianzas" y "el modelo de reconciliación, unidad y prosperidad", instaurados en enero de 2007 y basados en la búsqueda de consensos con los empresarios y los sindicatos. Además, dejó las manos libres a Ortega para escoger su compañero de fórmula en la vicepresidencia y "definir" las listas de 90 diputados nacionales y 20 del Parlamento Centroamericano.
El mandatario lleva más de la mitad de su vida como líder indiscutible del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), partido del que ha sido su único candidato presidencial en siete ocasiones consecutivas, en los comicios de 1984, 1990, 1996, 2001, 2006, 2011 y ahora en 2016.
Ortega fue presidente del país centroamericano de 1985 a 1990 y coordinó una junta de reconstrucción nacional de 1979 a 1984, tras la caída de la dictadura de la familia Somoza que gobernó Nicaragua de 1937 a 1979. Retornó al poder en enero de 2007 tras haber ganado con el 38 % de los votos las elecciones de noviembre de 2006.
En las elecciones de 2011, pese a que la Constitución lo prohibía, se presentó como candidato a la Presidencia gracias a una maniobra jurídica con la que burló la norma constitucional que se interponía entre él y su objetivo de mantenerse en el poder cinco años más. El exguerrillero sandinista fue reelegido en 2011 con 62,45 % de los votos tras una cuestionada candidatura y una jornada electoral plagada de denuncias de irregularidades.
Reelección indefinida
Ahora, la última modificación constitucional, refrendada en 2014, establece la reelección presidencial indefinida, y la posibilidad de elegir al presidente en primera vuelta y con mayoría simple de votos. Los gobernantes sandinistas son favoritos para ganar las elecciones generales de noviembre en Nicaragua, con un 63,7 % de intención de votos, según la última encuesta de la firma local M&R Consultores.
Nicaragua elegirá el 6 de noviembre a un presidente, un vicepresidente, 90 diputados nacionales y 20 representantes ante el Parlamento Centroamericano (Parlacen). La oposición nicaragüense promueve la candidatura presidencial del diputado Luis Callejas, un médico que apoyó a la "Contra" antisandinista durante la guerra civil de los años 80 del siglo pasado, y de Violeta Granera, una exdirigente de una ONG.
RML (dpa, acan-efe)