Panorámica de Sajonia
26 de julio de 2009
El estado federado de Sajonia cuenta con una historia de más de mil años. Evolucionó de condado a reino y vivió su gran apogeo económico y cultural bajo el rey Augusto el Fuerte a principios del siglo XVIII.
Chemnitz – Ciudad Karl Marx – Chemnitz
Tras la Segunda Guerra Mundial, Sajonia pasó a formar parte de la RDA y fue dividida en tres departamentos alrededor de las ciudades más grandes: Leipzig, Dresde y Chemnitz, entonces Ciudad Karl Marx. Con la reunificación de Alemania, el 3 de octubre de 1990 fue refundado el Estado Libre de Sajonia.
Difícil cambio estructural
Sajonia se convirtió en el siglo XVI en una de las regiones alemanas más ricas gracias a un comercio, una industria y unas explotaciones mineras dinámicas. En el siglo XIX, Sajonia fue enclave central de la industrialización. Los centros más significativos son Dresde, Leipzig y Chemnitz. Las industrias más importantes anteriormente eran la minería, la fabricación de automóviles y maquinaria, así como la industria textil y química. Desde el final de la RDA, en Sajonia se ha registrado un extenso cambio estructural. La mayoría de las fábricas y empresas fueron cerradas. La tasa de paro se encuentra actualmente alrededor del 14 por ciento.
El segundo crecimiento económico más elevado de Alemania
Desde hace algunos años se desarrolla de nuevo una sólida clase media en sectores como artesanía, industria y servicios. En la industria, el estado federado apuesta por la fabricación de automóviles y maquinaria, así como en alta tecnología orientada al futuro, como microelectrónica, energía solar y biotecnología. Desde el año 2000, la economía ha crecido en Sajonia un 13,8 por ciento, tras Baviera el segundo crecimiento económico más elevado de todos los estados federados.
La Iglesia de Nuestra Señora, la Bóveda Verde y otros placeres artísticos
En Sajonia reina una activa vida cultural. La capital del estado federado, Dresde, ofrece con el elenco de construcciones barrocas del casco antiguo el marco arquitectónico para ello. La Semperoper –la ópera de Dresde-, varios teatros, festivales y más de 40 museos tienen aquí su sede. Los más significativos son las galerías de arte Alte und Neue Meister –antiguos y nuevos maestros-, la Grüne Gewölbe –Bóveda Verde-, o sea, la cámara del tesoro de los reyes sajones, así como el Museo Alemán de la Higiene. En Chemnitz abrió en el año 2007 el Museo Gunzenhauser, que contiene una de las colecciones más significativas de los "Klassische Moderne" -clásicos modernos- y de la pintura alemana de posguerra.
Diseminados por el territorio, una sucesión de castillos y palacios invitan al descubrimiento de la historia. Por ejemplo, el palacio Pillnitz, el palacio de caza Augustusburg o el castillo Stolpen. En Leipzig se ha establecido en los últimos años nuevamente la Feria del Libro, que prosigue la tradición de Leipzig como ciudad comercial y editorial. También musicalmente tiene el estado federado algo que ofrecer: el Thomanerchor –Coro de Santo Tomás- de Leipzig, dirigido en el siglo XVII por Johann Sebastian Bach; también el Kreuzchor –Coro de la Cruz- de Dresde, con más de 700 años de historia. Docenas de orquestas y festivales musicales marcan la vida musical de la región.