Papa lamenta guerra civil en Libia e insta a acoger a inmigrantes
24 de abril de 2011El Papa Benedicto XVI lamentó en su mensaje pascual que la alegría del Domingo de Resurrección se vea empañada por la guerra en Libia, e instó a Europa a recibir a los inmigrantes que huyen de los disturbios en el norte de África.
"En el cielo todo es paz y alegría. Pero en la Tierra por desgracia no es así", dijo Benedicto XVI ante más de 100.000 personas reunidas en la plaza de San Pedro ornamentada con 42.000 flores donadas por Holanda.
El pontífice, de 84 años, que celebra su sexta Pascua como líder de los católicos, dijo que el júbilo por la resurrección de Cristo se opone "al sufrimiento, al hambre, la enfermedad, la guerra y la violencia".
Libia, Costa de Marfil y Japón
El Papa dijo que el mensaje de Cristo debe llegar sobre todo a aquellos que están afectados por el sufrimiento y pidió el fin de la violencia de las armas en la guerra civil en Libia. El Papa pidió que la diplomacia y el diálogo ocupen el lugar de las armas, e instó a que se permita que la ayuda humanitaria llegue a aquellos que más la necesitan.
Pidió que se respeten los derechos humanos en Oriente Medio y el norte de África y apeló a Europa para que reciba a quienes huyen de los conflictos en esas áreas. "Que llegue la solidaridad de todos a los numerosos prófugos y refugiados que provienen de diversos países africanos y se han visto obligados a dejar sus afectos más entrañables", agregó.
A su vez, exigió que en Costa de Marfil se inicie "un camino de reconciliación y entrega".
En su mensaje recordó especialmente a las víctimas del terremoto, el tsunami y la crisis nuclear en Japón, para las que pidió que "encuentren consuelo y esperanza".
Roma en espera del 1 de mayo
Como punto culminante de la misa, transmitida en directo en numerosos países, el religioso pronunció la bendición "Urbi et Orbi" (a la ciudad y al mundo) en 65 idiomas.
A continuación Benedicto XVI se trasladó a su residencia de descanso Castel Gandolfo, al sur de Roma, para recuperarse de los esfuerzos de estos días. El Domingo de Pascua, que conmemora la resurrección de Cristo después de su crucifixión, se celebra una semana antes de la beatificación del fallecido papa Juan Pablo II, el próximo 1 de mayo, un evento al que se espera que acudan miles de fieles a Roma.
En la víspera el Papa presidió la Vigilia Pascual, durante la cual se encendió el cirio pascual y se lo llevó dentro de la catedral de San Pedro. La vela simboliza la resurrección de Jesús de entre los muertos, el motivo de celebración para los cristianos en Pascua.
Fuente: dpa/Reuters
Editora: Claudia Herrera Pahl