Parlamento rechazó candidato de Nueva Izquierda
8 de noviembre de 2005
Tres semanas después de salir derrotado en las tres rondas de votación de la sesión constitutiva Bisky volvió a sucumbir. Bisky obtuvo 249 votos a favor, frente a 310 en contra y 36 abstenciones, según comunicó el presidente del Bundestag, el conservador Norbert Lammert. De acuerdo con el reglamento, a cada grupo parlamentario le corresponde una vicepresidencia y, tradicionalmente, el designado por cada partido para ocuparla suele ser votado sin más por el resto de la Cámara.
Sin precendetes
Esto no fue así con Bisky en la sesión constitutiva, que rechazó su candidatura en tres rondas de votación sucesivas, lo que fue criticado luego incluso por los medios tradicionalmente poco afines a su formación, por considerarse un comportamiento desleal.
No es la primera vez que un político postcomunista aspiraba a una vicepresidencia del Bundestag, ya que en 1998 fue elegida para ese cargo la diputada Petra Blaess. Sin embargo, un amplio sector de los diputados rechazaron a Bisky, sea por sus hipotéticos vínculos pasados con la policía secreta germano-oriental, la Stasi -nunca probada-, sea como líder de los poscomunistas, herederos del régimen de la antigua Alemania
del Este.
Disidencia del Este más disidencia del Oeste
Esta formación es la sucesora del Partido del Socialismo Democrático (PDS), aglutinante de los comunistas del Este y de la disidencia socialdemócrata del conjunto del país. El Partido de la Izquierda. PDS obtuvo el 8,7 por ciento de los votos, un resultado mejor que el obtenido nunca por el PDS en unas legislativas y derivado en buena parte del carisma de sus dos líderes, el poscomunista Gregor Gysi y el ex-socialdemócrata Oskar Lafontaine.