Pedofilia en la Iglesia Alemana
23 de julio de 2002En los últimos días se han dado a conocer tres nuevos casos de abuso sexual de menores por parte de sacerdotes, y las altas cúpulas eclesiásticas parten de que se irán descubriendo más. En una sorpresiva nota enviada a los medios informativos, el presidente de la Conferencia Episcopal Alemana, el cardenal Karl Lehman, indica que " han salido a la luz casos de agresiones sexuales de curas a menores de edad, sobre todo a niños. Contemplado de manera objetiva, habrá que contar con que se descubran más casos".
La declaración de Lehmann es interpretada por muchos como aceptación implícita de un problema de grandes dimensiones. Según declaraciones de Franz Grave, obispo auxiliar del obispado de Essen, por cada 50 sacerdotes uno es pedófilo. Dicho de otra manera de los cerca de 18.000 sacerdotes que hay en Alemania, 300 serían pedófilos.
Fariseos en la Iglesia
En la diócesis de Grave fue suspendido recientemente un sacerdote por abusos cometidos hace 22 años. Las declaraciones de Grave en el sentido de que " no se trata de un fenómeno masivo que afecte exclusivamente a la Iglesia Católica, pues también se registra este tipo de abusos en el ámbito de las escuelas" es una disculpa que no justifica la conducta de estas personas. Así lo reconoce Lehmann que indica que " el asunto afecta a la médula de la Iglesia ... en donde estos casos tienen un peso especial". Ya desde hace tiempo se van acumulando críticas a las tibieza con la que la Iglesia Católica reacciona a este problema conocido. Lehmann indica en la citada nota a los medios de información que: "Ahora debemos preguntarnos de manera autocrítica si siempre hemos conseguido abordar los casos de forma adecuada", una pregunta que muchos critican duramente y causa gran estupor, pues el problema no es desconocido para la Iglesia.
Abusos injustificables
El profesor de teología, Peter Eicher, de Paderborn, no es ningún desconocido para la Iglesia Católica. Desde hace años se conocen sus acusaciones contra la iglesia por reprimir la información y esclarecimiento sobre los abusos sexuales de menores por parte de sacerdotes. Eicher indica que según estudios internos de la misma iglesia, un 4% de los sacerdotes tienen tendencias pederastas. Cerca del 30% de los sacerdotes son homosexuales. Estos datos son de conocimiento general, pero hasta el momento no se han tomado medidas para evitar posibles abusos. En opinión de Eicher el problema no radica en el celibato de los sacerdotes, la explicación con la que la iglesia ha buscado justificar en el pasado las violaciones cometidas por sus miembros. En opinión de Eicher, el problema radica en el hecho de que a esta vocación suelen sentirse atraídos jóvenes que por lo general, sufren el Complejo de Edipo. Son incapaces de romper con el estrecho vínculo materno y buscan instintivamente un lugar en el que no tengan que superar sus debilidades, lo que obstaculiza el desarrollo de una sexualidad normal. La Iglesia consciente de los hechos, no se concentra en solucionar el problema en su raíz y prefiere cerrar los ojos y ocultar los hechos. Sólo una iglesia libre y democrática, moderna y humana permitirá poner las bases para acabar con las violaciones en el seno de la iglesia.