Polémica por submarinos alemanes para Israel
4 de junio de 2012Alemania facilita los submarinos, y lo que Israel haga con ellos, es cosa suya – así reaccionó el Gobierno alemán a un informe publicado este fin de semana por el semanario Der Spiegel. Según la revista, Israel equipa con ojivas nucleares los submarinos construidos en Kiel.
“Con la ayuda de la tecnología marítima de Alemania, Israel ha conseguido establecer un arsenal nuclear flotante”, se lee en Der Spiegel. El Gobierno alemán se abstiene de comentar sobre el tema. El envío de submarinos se lleva a cabo sin armamento: “El Gobierno federal no toma parte en especulaciones sobre el posible equipamiento posterior”, dijo el portavoz del Gobierno Steffen Seibert en Berlín.
En general, la opinión pública internacional asume que Israel posee armas nucleares. En Israel, no obstante, este es un tema tabú. La línea oficial del Gobierno israelí sigue una máxima: “ni desmentimos, ni confirmamos”. Los expertos calculan que Israel tiene en su territorio entre 200 y 300 ojivas nucleares.
Submarinos equipados con armamento nuclear le darían a Israel la oportunidad de reaccionar ante un ataque nuclear en su propio terreno. Si Israel confirmara oficialmente la posesión de armas nucleares, sus aliados tendrían que tomar posiciones. De esta forma, no obstante, pueden continuar siendo tan ambiguos como el portavoz del Gobierno alemán este lunes (04.06.2012).
Tecnología de punta a precios especiales
El Gobierno Federal justifica su envío de submarinos aduciendo que, con ello, Alemania contribuye a la seguridad de Israel. La seguridad del Estado judío constituye una "razón de Estado" para Alemania, reiteró el portavoz del Gobierno de Berlín. Y en la raíz de esta postura alemana, recordó Seibert, se halla la "responsabilidad histórica” de su país con el destino del pueblo israelí.
Para el Gobierno, este sentido de la responsabilidad llega tan lejos que no duda en subvencionar parte de los costos del Gobierno israelí. Los submarinos de la clase Delfín son productos especiales, adaptados a las condiciones militares de Israel. Pero la pregunta sobre si el suministro alemán ha ido acompañado de sistemas especiales con capacidad para portar ojivas nucleares permanece sin respuesta.
A pesar de la frágil situación de seguridad en Oriente Próximo, hasta el momento, ningún Gobierno Federal –independientemente de su orientación política- había puesto reparos en suministrar submarinos a Israel. “Mientras flote, vale”, parece ser la máxima que ha prevalecido hasta la actualidad. La frase se le atribuye al exministro de Asuntos Exteriores, Hans-Dietrich Genscher, del partido liberal (FDP).
La industria de defensa alemana se beneficia de estos acuerdos promovidos por el Estado, especialmente la compañía constructora de barcos y submarinos Howaldtswerke-Deutsche Werft, en Kiel.
Con precios aproximados de 400 millones de euros por pieza, el encargo y posterior venta de cada submarino constituye un gran negocio. Para 2017, Alemania quiere enviar tres submarinos más a Israel.
La oposición exige una explicación
También los partido alemanes de oposición destacan el especial interés de este país europeo en la seguridad de Israel, pero exigen informaciones más detalladas sobre el acuerdo en torno a los submarinos. “Se trata de comprobar si en el contrato de suministro se contemplaron los lanzadores de misiles, o si estos se instalaron a posteriori”, dijo a Deutsche Welle el socialdemócrata Rolf Mützenich, experto en temas de política exterior.
“Las especiales relaciones entre Alemania e Israel pueden justificar muchas cosas, pero nunca el envío de submarinos”, critica Gregor Gysi, jefe del grupo parlamentario del partido La Izquierda en el Bundestag. Los Verdes insisten en que Israel parece no haber cumplido su parte del acuerdo con Alemania. Se trata, entre otras cosas, de garantizar, a cambio de los submarinos, la construcción de una planta de tratamiento de aguas residuales en la Franja de Gaza. Los partidos de la oposición quieren que el tema se debata en el Bundestag.
Autora: Nina Werkhäuser / LAB
Editora: Rosa Muñozv Lima