Protestas recurrentes en Sao Paulo
14 de junio de 2013En Sao Paulo, el corazón financiero de Brasil, la cuarta protesta contra el aumento del pasaje del transporte colectivo terminó con decenas de heridos, algunos de los cuales fueron alcanzados por las balas de goma de la policía militar. La detención de un centenar de personas y los daños materiales que dejaron las manifestaciones en las avenidas principales de la urbe brasileña completan el cuadro de una serie de sucesos que comienza a atraer la atención de la prensa internacional.
Las escenas registradas en Sao Paulo y la frecuencia con que se ve entre los manifestantes la máscara con la efigie de Guy Fawkes –ubicua durante las revueltas de la “primavera árabe” y, más recientemente, en las protestas de Estambul– llevan a algunos analistas a preguntarse si la situación no se le está yendo de las manos a la mujer fuerte de Brasilia, Dilma Rousseff, y si es posible que las manifestaciones de descontento popular afloren en otras partes del país, como ocurrió en Turquía. En Río de Janeiro también ha habido protestas por el alza del pasaje de transporte público.
Abundan las acusaciones de que la policía actuó con una violencia excesiva e indiscriminada, de la cual fueron víctima no solamente los responsables de los actos vandálicos cometidos en el marco de la protesta, sino también quienes manifestaban pacíficamente y también los representantes de la prensa. Según el diario Folha de Sao Paulo, entre las decenas de heridos hay siete periodistas del periódico. La policía militarizada se hizo presente con la Tropa de Choque, la Caballería, el batallón de Patrullaje Ostensivo (ROTA), la Fuerza Táctica, tanques blindados y helicópteros.
Si bien las cifras sobre heridos y detenidos no fueron confirmadas por las autoridades, los medios hablan de más de sesenta personas detenidas. Los abogados del Movimiento Pase Libre, convocante de la manifestación, afirman que se hicieron más de 150 arrestos. La policía militar estima que más de 5.000 personas participaron en la cuarta manifestación organizada por el Movimiento Pase Libre, que no acepta el aumento del pasaje de transporte colectivo de tres a 3,20 reales (1,11 euros), decretado por la alcaldía la semana pasada.
ERC ( dpa )