Gündogan: lesionado, pero codiciado

En la actual temporada Ilkay Gündogan apenas ha jugado 250 minutos; los últimos 27 con la selección alemana en el partido amistoso contra Paraguay, en Kaiserslautern, el 14 de agosto del 2013. En aquella ocasión se lesionó en la espalda y su recuperación, casi seis meses más tarde, aún no se completa. Ello, sin embargo, no frena los deseos de los grandes clubes de Europa, entre ellos el Barcelona, de ficharlo.

Lesión misteriosa

Al joven mediocampista del Dortmund le fue diagnosticado, en primera instancia, un golpe en la espalda que derivó en una delicada luxación en la columna vertebral. Los dolores no desaparecieron y conforme pasaron las semanas se intensificaron. Allí se supo que Gündogan estaba más grave de lo que se creyó en un principio.

El juvenil futbolista lleva más de cinco meses intentando recuperarse de un problema mayor, sobre cuya verdadera y completa dimensión aún no hay consenso médico. Las molestias de espalda de Gündogan -en eso coinciden los especialistas-, tienen su origen en el sistema nervioso de la columna.

El regreso a las canchas de la estrella alemana se ha pospuesto ya en varias ocasiones pues los dolores en la cadera, canillas y pantorrillas no dan el “brazo a torcer”. “No estoy en plena condición física y tampoco libre de dolores. Estoy seguro de que me recuperaré, pero la prioridad, por ahora, no es jugar sino volver a estar sano”, contó Gündogan esta semana en España, donde el Dortmund hizo estación en la preparación de la segunda parte de la temporada local e internacional.

A sus escasos 23 años, Ilkay Gündogan es considerado uno de los mejores futbolistas alemanes del momento, y es sin duda -internacionalmente- el joven más talentoso en su posición. El seleccionador Joachim Löw cuenta con él para el Mundial, y el jugador también se ha trazado como objetivo principal tomarse con calma su proceso de rehabilitación para poder estar a punto para Brasil 2014. “Tengo la sensación de que llegaré muy pronto a mi mejor nivel cuando vuelva a jugar. Por eso puedo contar con mi convocatoria al Mundial, y voy a pelear por ser titular de la selección alemana en Brasil” dijo.

Talento apetecido

Aún así, es todavía incierta la fecha en la que Gündogan podrá volver a jugar 90 minutos de fútbol de una forma normal, sin necesidad de asistencia médica y libre del tormento físico que le causa su lesión. Eso, con seguridad, no sucederá pronto, pues a los problemas de espalda se le sumó esta semana una bronquitis que lo ha alejado de los entrenamientos.

Y pese a que nadie sabe con certeza cuándo Gündogan exhibirá nuevamente el nivel deportivo que lo lanzó a la fama internacional con el Dortmund, los clubes más prestigiosos del mundo se han trenzado en una competencia por conseguir su ficha.

En Dortmund, donde su contrato vence el verano del 2015, se ha negado a renovar el vínculo laboral para conservar todas las opciones abiertas. “Voy a tomar pronto una decisión que estará muy bien pensada. Por lo pronto todo es posible”, comentó Gündogan el próximo paso en su carrera en entrevista con la publicación Sport Bild.

Las directivas de su actual equipo se han mostrado confiadas en que podrán retener en sus filas al talentoso futbolista, pero las alternativas que se le ofrecen a Gündogan no son para nada despreciables. Los medios de comunicación especializados, tanto en Alemania como en el extranjero, coinciden en colocar al jugador en otra liga la próxima temporada.

Real Madrid y Barcelona, según las informaciones de prensa, están pujando entre sí por el joven alemán. Pero no solo en España esperan poder contratarlo, también Manchester United y Manchester City en Inglaterra han expresado interés en Ilkay Gündogan, a quien, tras una completa sanación de sus dolencias, le espera un futuro brillante, donde quiera que firme un nuevo contrato.