Rebaja de locomoción no frena las protestas en Brasil
20 de junio de 2013Los activistas que promovieron sendas protestas en Sao Paulo y Río de Janeiro y otras ciudades lograron el miércoles su primer triunfo, al anunciar las autoridades la suspensión del aumento de las tarifa del transporte público en atención a sus demandas.
Sin embargo, los activistas advirtieron que si bien reconocen una "primera victoria", no están conformes con la forma en que será compensada la supresión del aumento. La idea no era sacar dinero de la salud y la educación, dijo un representante del grupo, subrayando que “lo que tiene que haber es una disminución de los lucros de los empresarios (del transporte)".
Costo para las arcas fiscales
"Vamos a tener que cortar inversiones porque las empresas no tienen cómo asumir (los gastos de la suspensión del aumento)", dijo el gobernador de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, quien destacó que la gobernación paulista le dará "prioridad máxima" a la cuestión del transporte público.
Lo mismo ocurre en Río de Janeiro. Según indicó el representante del movimiento carioca, Tadeu Lemos, la reducción de tarifas anunciada fue "una victoria", pero ésta no le pone un punto final a las reivindicaciones populares. Explicó que el grupo es consciente de que la forma como fueron suspendidos los reajustes resultará sumamente costosa para las arcas públicas de los municipios, y perjudicará inversiones en otras áreas como salud y educación.
Otras ciudades también anunciaron rebajas en las tarifas del transporte público, o se dispusieron a agilizar la concreción de rebajas anunciadas anteriormente en respuesta a las manifestaciones, entre ellas Niteroi, Porto Alegre, Pernambuco, Recife, Joao Pessoa, Cuiabá, Pelotas, Montes Claros y Foz do Iguaçu.
Más que transporte
En todas estas ciudades hubo en los últimos días manifestaciones en las que participaron millares de personas. Río y Sao Paulo fueron las que arrastraron más personas a las calles. Además del tema del precio del transporte, los diversos grupos de manifestantes critican los gastos que el gobierno está realizando para organizar el Mundial de 2014 y la Copa Confederaciones en desmedro de más recursos para salud, vivienda y educación, protestan contra la corrupción y exigen mejoras en los servicios públicos, entre otras demandas.
Por primera vez se pronunció también sobre las protestas el nuevo astro del equipo nacional brasileño, Neymar. “Me apena lo que está ocurriendo en Brasil“, indicó el futbolista en un mensaje difundido a través de las redes sociales. “Quiero un Brasil más justo, más seguro, más sano y más sincero”, apuntó Neymar, agregando que es tarea del gobierno velar por buenas condiciones en el transporte público, la salud y la educación.
er (dpa, afp)