Rebeldes capturan pozos petroleros en Sudán del Sur
26 de diciembre de 2013
Desde todas partes del mundo se hacen llamados para que cese la violencia en Sudán del Sur. China, la Unión Europea, Estados Unidos y la Unión Africana han mostrado su preocupación y enviado emisarios al país más joven del mundo para intentar mediar en el conflicto desatado por las diferencias entre el presidente Salva Kiir y el exvicepresidente Riek Machar, pertenecientes ambos a etnias distintas y rivales políticos desde hace años.
Pasos en esa línea dieron este jueves (26.12.2013) el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, y el primer ministro de Etiopía, Hailemariam Desalegn, quienes llegaron hasta la capital sursudanesa, Juba, para reunirse con Kiir e intentar buscar una solución al problema, que ha causado ya cientos de muertos. De hecho, Naciones Unidas investiga reportes de asesinatos en masa desde que la violencia comenzó a expandirse por el país tras un presunto intento de golpe de Estado.
El temor es que Sudán del Sur se desintegre en una guerra civil con bases étnicas. “La reunión con el presidente (Kiir) fue muy constructiva y sincera”, dijo el ministro de Exteriores de Etiopía, Tedro Adhanom. En el encuentro no participó el líder rebelde, el exvicepresidente Machar, quien en una entrevista emitida por televisión dijo que estaba dispuesto a participar en conversaciones de paz, siempre que éstas se celebraran en la capital de Etiopía, Adís Abeba.
Rebeldes capturan pozos petroleros
Mientras en la capital se busca una salida a los enfrentamientos, en el estado de Unidad los rebeldes leales a Machar capturaron algunos pozos petroleros, principal fuente de ingresos del empobrecido país africano, y se teme que puedan inutilizarlos. El ministro de Petróleo, Stepehn Dhieu Dau, confirmó la noticia. “Algunos pozos petroleros están en manos de soldados rebeldes y tememos que puedan causar daño a las instalaciones y al medioambiente", dijo a la agencia Reuters.
Además, el portavoz del Ejército, Philip Aguer, confirmó que hay choques armados en el principal estado productor de petróleo, Alto Nilo, por tercer día consecutivo. “Ellos controlan la mitad del pueblo (Malakal) y tropas del Gobierno controlan la otra mitad. Serán derrotados pronto”, señaló el militar vía telefónica. Naciones Unidas, en tanto, informó que en cinco de los diez estados del país hay enfrentamientos.
La situación ha provocado una crisis humanitaria que ha llevado a miles de personas a abandonar sus hogares. En bases de Naciones Unidas hay unos 45.000 refugiados. Si bien las autoridades dicen que la producción no se ha visto afectada, el cierre de algunos pozos extractivos redujo en un quinto la exportación de crudo, producto que supone el 99 por ciento del presupuesto del Esatado.
DZC (Reuters, dpa, AP)