Refugiados: la cumbre de los reproches
15 de octubre de 2015A solo tres semanas de haber celebrado una cumbre extraordinaria sobre la crisis de refugiados en Europa, los 28 jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) vuelven a hacer balance en Bruselas y a discutir pasos a futuro. Según la perspectiva de la Comisión Europea (CE) y del Parlamento Europeo (PE), el balance es más bien discreto. Las decisiones de la cumbre extraordinaria no se cumplieron, se quejó el presidente de la CE, Jean Claude Juncker.
“Falta hasta la fecha la adopción de medidas necesarias y obligatorias por parte de los Estados miembro en cuestión de incremento de personal, tanto en Grecia como en otros lugares”, dijo Juncker. De 1.100 empleados requeridos para la agencia fronteriza Frontex y la autoridad en materia de asilo EASO, solo se ha registrado el 10 por ciento. También en materia de fondos económicos hay carencias. “En general, hace falta una cantidad considerable de dinero. Los Estados miembro están en deuda”, indicó.
Jean-Claude Juncker y también el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, muestran preocupación por la credibilidad de los jefes de Gobierno europeos, y por la Unión Europea en general. Los gobernantes europeos no pueden anunciar medidas y luego dejarlas sin implementar. "Entonces se dice que Europa no cumple. Así nada puede funcionar", advirtió Schulz.
Merkel demanda un mayor compromiso de los demás
La canciller alemana, Angela Merkel, llamó a los demás Estados a llenar estos vacíos. Ya a su llegada a Bruselas dijo esperar señales claras en cuanto a que todos los países de la UE están dispuestos a cumplir con sus obligaciones y a poner personal a disposición.
“Es claro que actualmente unos cuantos países alojan a muchos refugiados”, afirmó la canciller, que calificó la situación de los refugiados en Europa como “desordenada”. Por eso, “necesitamos mayor orden y una conducción más clara”, aseveró.
La Unión Europea necesita personal adicional y, hasta finales de este año, más oficinas de registro en Grecia e Italia. Además, en estos países hacen falta más alojamientos permanentes para refugiados. Así, el destino de los refugiados en territorio griego e italiano es aún incierto. Se efectuó ya un primer ensayo con el esquema de distribución según países. Diecinueve refugiados de Eritrea fueron trasladados a Suecia. “Hemos comprobado los procedimientos y ahora vemos que funcionan. Podemos elevar la cifra de refugiados trasladados”, dijo un funcionario de la Comisión Europea en Bruselas.
En los próximos años, la Unión Europea quiere reubicar a 160.000 personas. Sería solo el primer paso, dijo la canciller alemana antes de viajar a Bruselas. La redistribución, en la que hasta ahora solo participan seis Estados receptores, fue implementada contra la voluntad de países miembros de la UE en Europa del este.