Rehenes dentro y fuera de Nicaragua: ¿qué hará Europa?

"Una de las dos pruebas que tenían contra mí era un segmento de la audiencia que tuve en esta delegación del Parlamento Europeo el 15 de marzo de 2021", contó a esa institución por videoconferencia Dora María Téllez, la política nicaragüense desde el destierro en Estados Unidos.

"En  los interrogatorios siempre volvían a cuestionar por qué yo había hecho alocuciones a organismos internacionales”, dijo, por su parte, Félix Madariaga, excandidato presidencial, expreso político y también desterrado.

A los ahora "traidores a la patria”, cuyos bienes han sido incautados, se les tomó muy a mal que buscaran apoyo internacional. Ahora, lo que Madariaga califica como "régimen de terror” podría extenderse a los que se quedaron, a padres, hijos, amigos. "Hagan o no hagan oposición”, subraya el político.

La situación no es ajena a la Delegación para las Relaciones con los Países de América Central de la Eurocámara. Sobre todo desde la ola represiva de 2018, la situación del país centroamericano se ha expuesto en varias ocasiones ante políticos, diplomáticos, funcionarios, miembros de la sociedad civil.

"La situación actual es de angustia. Aunque se están tramitando permisos de trabajo, hay gente que no habla inglés, y la inserción en Estados Unidos es compleja. También hay problemas de salud física y mental. Los hijos de los que estamos desterrados no pueden salir legalmente porque el gobierno se niega a concederles un pasaporte”, dijo Dora María Téllez a esa delegación, añadiendo que en ese grupo también hay cuarenta personas de la tercera edad.

Ante esta situación, ¿cómo deben reaccionar los países miembros de la Unión Europea? Hay que partir de la base de que la concesión de asilo es competencia de cada país del club europeo, no de Bruselas. "Estas decisiones, -prohibidas por instrumentos internacionales- son una violación al derecho de acceso a suelo, patria, nombre y arraigo”, explica a DW Ángela Buitrago, integrante del Grupo de Expertos de Naciones Unidas sobre Nicaragua.

"Hay personas a las que incluso se les ha quitado su pensión jubilar. Hay que entender la situación como una crisis humanitaria”, agrega la especialista desde Ginebra, donde presentará el lunes próximo (6.03.2023) el informe sobre derechos humanos en el país centroamericano. Estas últimas violaciones del derecho internacional son los componentes más recientes de un cuadro que -incluyendo ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias, tortura y tratos crueles- apunta a crímenes de lesa humanidad cometidos por el gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo.

Así las cosas, ¿qué se puede hacer desde Bruselas? "No todos, pero una parte de los 222 cumplen fácilmente los criterios para usar el instrumento de protección a defensores de derechos humanos”, explica a DW Duccio Bandini, jefe adjunto de la división para México, América Central y el Caribe del Servicio Europeo de Acción Exterior.

"Son apoyos muy puntuales para protegerlos temporalmente o para sacarlos de una situación de peligro, independientemente de dónde se encuentren”, agrega Bandini. Esta medida podría aplicarse a algunos de los 222 que se encuentran en Estados Unidos.

Pero el cuadro es aún más complejo. "Los familiares de los desterrados no solo son rehenes, sino que la amenaza se cierne sobre ellos: pueden ser detenidos, perseguidos, expulsados. Es la mano larga del régimen”, explica Buitrago. En esta situación, ¿puede la ayuda humanitaria apoyar a los familiares de los 'apátridas'? "Dentro de Nicaragua es un riesgo para ellos, se incrementa su grado de exposición”, responde Bandini.

Sea nacionalización, asilo o defensa de defensores, Buitrago resume así las tareas por hacer en favor de los nicaragüenses: "Son acciones humanitarias que se deben otorgar a cualquier población. Pero, en este caso específico, hay que ejercer acciones para reprochar, judicializar e individualizar responsabilidades de violaciones y violadores”, exige la especialista de la ONU.

Como fuere, Félix Madariaga, que salió el 9 de febrero de la prisión donde estuvo buena parte incomunicado desde el 21 de junio de 2021, aboga también por una acción de las instituciones de la UE para permitir la reunificación familiar: "Están sin pasaporte, son rehenes dentro de Nicaragua, para impedirnos hablar”.

(cp)