Sebastião Salgado: lo mejor del planeta
20 de abril de 2015Pozos petroleros en llamas, hambruna en el norte de África, minas de oro en Brasil: Sebastiao Salgado fotografió durante décadas imágenes estremecedoras. En el transcurso de su carrera visitó más de un centenar de países, documentando con su cámara la pobreza, el destierro y la guerra.
En algún momento pensó dejar la fotografía para siempre. Se retiró a su terruño de Aimorés, en Brasil, y se dedicó a reforestar la región. Luego, en 2004, emprendió un viaje de ocho años por el mundo. Su vida experimentó un vuelco: majestuosos volcanes, gigantescos glaciares, bosques, mares y desiertos poblaron sus nuevas fotografías.
La fuerza de “Génesis”
Es como si Salgado hubiera buscado la contraparte del terrible sufrimiento que antes documentaba. Su libro de fotografías “Génesis” es como una “nueva representación de nuestro planeta”. Cuando presentó por primera vez esas imágenes, en 2013, señaló: “quería que todos pudieran ver cuán hermosa es la Tierra, cuán maravillosa es la luz del sol y cuánta fuerza tiene la naturaleza”.
La exposición itinerante “Génesis”, que se presenta desde el 18 de abril hasta el 16 de agosto en Berlín, incluye 245 fotografías. Son impresionantes tomas captadas en más de 30 viajes y muestran las últimas regiones del planeta que aún no han sido tocadas por la civilización.
La exposición está dividida en cinco capítulos. “Planet South” está dedicado a la fauna de las Galápagos, de la Antártida y el Atlántico Sur. “Santuarios” muestra lugares apartados y ricos en biodiversidad, como Madagascar, Sumatra y Papúa Occidental. También fotografió a cerca de 20 pueblos nativos, pero el mundo d las plantas y animales marca la pauta de esta gira fotográfica.
Pasión por la fotografía
Sebastiao Salgado, nacido en 1944 en Brasil, creció en la finca de sus padres. Estudió economía y en 1969 viajo a París, escapando de la dictadura. En 1971 se mudó a Londres. Su trabajo de entonces en el Banco Mundial lo llevó varias veces al África, donde comenzó a fotografiar. En 1973 decidió dedicarse por completo a la fotografía, que se convirtió en la pasión de su vida.
“La fuerza de un retrato radica en la fracción de segundo en que uno comprende algo de la vida de una persona”, dice Salgado en el documental de Wim Wenders “La sal de la Tierra”, nominado para un Oscar. En ese film, el fotógrafo brasileño habla sobre sus recuerdos de los lugares donde captó las imágenes. En “Génesis” destaca las partes más hermosas de la Tierra. “Todas las fotos caracterizan a nuestro planeta”, indicó Salgado en conversación con DW. Y la naturaleza es su mejor cara.