Si hay educación hay paz… y viceversa
7 de septiembre de 2012
La UNESCO, el organismo ecargado de la educación de Naciones Unidas, ha centrado sus esfuerzos en 2012 en la relación entre alfabetización y paz. Este es también el tema central de la conferencia internacional “Alfabetización femenina para un desarrollo integrador y sostenible”, que tiene lugar en Nueva Delhi, del 8 al 10 de septiembre.
El analfabetismo no solo afecta a los países pobres; un 2% de los europeos tampoco dominan ni la lectura ni la escritura, y esto a pesar de contar con todos los medios para aprender. Según un estudio de la Universidad de Hamburgo, en Alemania hay 7 millones y medio de “analfabetos funcionales”, o sea que no saben leer ni escribir correctamente. De éstos, el 57% tiene incluso un trabajo.
Millones de niños y mujeres en desventaja
En el resto del mundo la situación es significativamente más grave. La UNESCO cuenta 775 millones de adultos analfabetos, en su mayoría mujeres. Otros 67 millones de niños en edad de asistir a la escuela primaria no lo hacen y 72 millones de adolescentes en edad de cursar el primer ciclo de la enseñanza secundaria tampoco gozan de su derecho a la educación.
Once países del mundo tienen más de 50% de adultos analfabetos y casi todos se encuentran en África, con excepción de Haití. En la misma América Latina el problema no es menor, aunque se calcula que “solo” el 4,6% de los latinoamericanos no saben leer ni escribir.
“Exhorto a los gobiernos, las organizaciones internacionales, la sociedad civil y el sector privado a que hagan de la alfabetización una prioridad política, para que todas las personas puedan desarrollar su potencial y participar activamente en la conformación de sociedades más sostenibles, justas y pacíficas”, es el urgente llamado de Irina Bokova, directora General de la UNESCO.
Ejemplos para el mundo en América Latina
Pero no todo es derrota en la lucha por hacer valer el derecho a la educación. En la antesala de la Conferencia, la UNESCO ha entregado este 7 de septiembre en París, la sede de la organización, los Premios UNESCO-Rey Sejong (patrocinado por Corea del Sur) y UNESCO-Confucio (financiado por China) a proyectos exitosos de alfabetización. Dos de ellos a programas en América Latina.
El Instituto Nacional para la Educación de los Adultos de México (INEA) ha sido uno de los premiados por sus programas de alfabetización bilingües que han reducido el analfabetismo de las poblaciones indígenas.
De otra parte, reconociendo el aporte a la erradicación de la pobreza a través de la educación de jóvenes y adultos vulnerables, la UNESCO le otorgó el Premio Confucio a la Alfabetización a la Fundación Transformemos, de Colombia. A ella se le agradece que Cartagena de Indias pudiera ser declarada ciudad caribeña libre de analfabetismo. El lema de los alfabetizadores es sencillo: “Si hay educación hay paz…y viceversa”.
Autor: José Ospina-Valencia /dpa
Editora: Emilia Rojas