El gigante alemán del acero ThyssenKrupp no acaba de salir de la crisis. Tras la muerte esta semana de su presidente de honor, Berthold Beitz - el patriarca que dirigió la compañía durante décadas - el grupo industrial seguirá centrando sus esfuerzos en reducir pérdidas. Según comunicó la directiva, el proceso de venta de las fábricas de acero de Estados Unidos y Brasil continúa su plan previsto.