Tokio Hotel suspende su gira europea
25 de marzo de 2008No hay motivos para el pánico: si todo sale bien, Bill volverá pronto a ser el de antes. El cantante de Tokio Hotel, uno de los grupos de música alemanes con más éxito internacional de los últimos tiempos, tiene que someterse “lo antes posible” a una operación de las cuerdas vocales, dio a conocer en Berlín una portavoz de Four Artists, la empresa que organiza las giras del conjunto.
La culpa la tiene un quiste
Los quistes en las cuerdas vocales no son un fenómeno extraño entre los cantantes y las personas que se ven obligadas, por motivos profesionales u otros, a forzar en exceso la voz. Una vez formados, sólo ayuda el bisturí. Sin embargo, la operación no es arriesgada y, por lo general, unas cuatro semanas bastan para recuperar las viejas virtudes.
Además, Bill es joven. A sus 18 años, el postoperatorio es un juego de niños. Por eso, los médicos coinciden en tranquilizar a sus fans, la mayoría de las cuales maltratan la voz a fuerza de gritos aún más que su ídolo: Bill volverá pronto a entonar “Durch den Monsun” ("A través del monzón") sobre los escenarios de todo el mundo sin que nadie note la diferencia.
Tristeza y muchas lágrimas
Y pese a todo, muchos seguidores de Tokio Hotel no pudieron contener las lágrimas al enterarse de que el grupo suspende su gira europea: sin voz no hay espectáculo. “Después de haber cancelado los conciertos en Portugal, España, Francia e Italia, nos vemos obligados a anular ahora el resto de la gira '1000 Hotels European Tour', para la que ya no quedaban entradas”, declaró Four Artists.
Desde principios de las vacaciones de Semana Santa, más de 100 chicos y chicas hacían cola frente al Pabellón Westfalia de Dortmund, en el oeste de Alemania. No para comprar una entrada de las que ya no quedaban, sino para estar entre los primeros en entrar el 31 de marzo, fecha del planeado concierto, al recinto y conseguir así un buen sitio desde el que admirar a sus ídolos. Algunos habían estaban dispuestos a pasar la semana en una tienda de campaña. Otros en las instalaciones que el Departamento de la Juventud había habilitado para acogerlos.
“Ha habido mucha tristeza y lágrimas, pero se han marchado sin montar alboroto. A muchos niños los han venido a recoger sus padres”, describía una portavoz del ayuntamiento las escenas de repliegue del campamento. En las próximas semanas se decidirá si los conciertos, que también llevaban a Tokio Hotel hasta Suecia, Eslovenia, Serbia, Finlandia, Dinamarca y Noruega, se suspenden o sólo se posponen.