¿Tratado de Schengen para transmisión de datos?
20 de febrero de 2014La abreviatura “www” significa “world wide web”, es decir: red global, sin fronteras. Pero el caso de espionaje de datos por parte del servicio secreto estadounidense NSA -que causó tensiones en Alemania y otros países respecto de EE. UU.-plantea, evidentemente, la necesidad de limitar más la circulación de datos dentro de las fronteras de la Unión Europea (UE).
En su mensaje semanal de video, la canciller alemana, Angela Merkel, anunció que planea discutir con el presidente francés, François Hollande, acerca de una red europea de comunicación que permita esquivar la vigilancia de información de la NSA.
Transmisión de paquete de datos
Ya la Deutsche Telekom, con sede en Bonn, comenzó hace unas semanas con el debate sobre la construcción de una red europea de información. En el plano real, el “Tratado de Schengen” regula la libre circulación de personas y bienes dentro de las fronteras europeas. Sin embargo, el espacio Schengen no abarca a todos los países de la Unión Europea. En el marco de una “Ruta Schengen para datos” se podría pensar en sortear elegantemente a Gran Bretaña, por ejemplo, cuyo servicio secreto GCHQ llevó a cabo acciones de espionaje dentro de la UE.
En diversos foros de internet, activistas de la red hablan ya de una “Schlandnet” (Deutschlandinternet), un debate que reflejas las dudas acerca de si se puede limitar a nivel nacional la idea de una “world wide web”.
Dominique Petersen, del Instituto de Seguridad Interior de la Universidad de Westfalia cree que no. Según ella, la red no fue construida por países, sino que tuvo desde un principio una estructura global. “Los enormes servidores de las compañías de internet están ubicados casi siempre en el extranjero, y los proveedores envían paquetes de datos a través de diferentes países”, explica. Si bien se puede lograr que la transmisión de datos intereuropea permanezca dentro de los límites de Europa, esos datos solo representan una ínfima cantidad de la circulación total de información en internet. “Si navego, por ejemplo, en Facebook, compro en Amazon o me muevo dentro de otros grandes portales, entonces mis datos abandonan el territorio alemán, y también el europeo”, señala la experta.
Una red europea: útil pero cara
Philipp Blank, encargado de Seguridad Informática y Protección de Datos en Deutsche Telekom, defiende, por su parte, el impulso que se está dando a la creación de una “Ruta Schengen para datos”. En su opinión, no se trata en absoluto de comprimir la transmisión de datos dentro de límites nacionales. “Nos preguntamos por qué un e-mail de Bonn a Berlín debe pasar por Nueva York antes de llegar a destino”, dijo Blank en entrevista con Deutsche Welle. En EE. UU., por ejemplo, “hace tiempo que se determinó que la transmisión de datos con un destinatario y un remitente en EE. UU. debe tener lugar dentro de las fronteras de ese país”.
Dominique Petersen, del Instituto de Seguridad Informática, duda, sin embargo, de que una red europea de comunicación sea más segura. “Puede ser que con eso se dificulte la labor de los servicios secretos extranjeros que no cuentan con una estructura tecnológica como la de EE. UU. o Gran Bretaña”, aclara, “pero para la NSA, por ejemplo, no sería un problema construir estaciones de recepción de datos en Europa”. Desde su punto de vista, una “Ruta Schengen para datos” no solo carecería de utilidad, sino que sería un emprendimiento muy caro. Actualmente, los router buscan no solo las vías más rápidas, sino también las más baratas para enviar los paquetes de datos que circulan por todo el mundo. Si se los obligara a permanecer dentro de las fronteras europeas, la navegación en internet podría transformarse en un asunto caro para los usuarios.
Empresas europeas prevén ventajas de mercado
La Deutsche Telekom se ve confrontada con sospechas de que solo planea obtener un beneficio aún mayor. “La Telekom sería, seguramente, una de las grandes ganadoras de una ‘Ruta Schengen para datos', opina también el experto en Informática Dominique Petersen. También se prevén mejores oportunidades para las compañías europeas de internet frente a la fuerte competencia estadounidense. Y el escándalo de la NSA ofrece, especialmente a Alemania, la posibilidad de perfilarse como un emplazamiento informático confiable.
El portavoz de Telekom, Philipp Blank, asegura que la empresa no registraría mayores ganancias: “Para nosotros, el beneficio adicional sería mínimo”. El objetivo de Telekom es, según él, recuperar la confianza que perdieron los usuarios. Pero para lograrlo, habría que explicarle a la gente lo inseguro que es navegar en la red. “Los e-mails son como postales: pueden ser leídos por todos. Y eso también se aplica a la transmisión de datos dentro de Alemania o Europa”.
El único remedio a ese mal es la codificación de datos, porque entonces “da igual qué ruta toman los datos y lo que pasa en el camino”, dice Blank. Pero le circulación de información en internet dentro de Europa aún está muy lejos de poder ser encriptada. Quien quiera que sus e-mails sean seguros debe usar un programa de codificación.