Ucrania y las garantías de seguridad tras la guerra
15 de septiembre de 2022En los últimos días, el Ejército ucraniano ha recuperado gran parte de territorio en el noreste de la ciudad de Járkov. John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de EE. UU., observó "un cambio, un impulso en las fuerzas armadas ucranianas".
Otros son más escépticos, por ejemplo, Eberhard Zorn, inspector general del Ejército alemán. Para él, se trata de "contraataques que pueden usarse para recuperar ubicaciones o secciones individuales en el frente, pero no para hacer retroceder aRusia”.
Anders Fogh Rasmussen, exsecretario general de la OTAN, junto con Andriy Yermak, jefe de la Oficina Presidencial de Ucrania, presentaron un documento sobre garantías de seguridad para Ucrania después de la guerra.
Objetivo a largo plazo: la OTAN
El hecho de que Anders Fogh Rasmussen, exsecretario general de la OTAN, haya colaborado en dicho proyecto es una señal clara de cuál es el objetivo: el ingreso de Ucrania a la OTAN. Para ello, el Ejército ucraniano tiene que estar equipado y entrenado. Un grupo de países, según la hoja de ruta, tendría la tarea de garantizar la seguridad de Ucrania. Esos países son EE. UU., Gran Bretaña, Alemania, Canadá, Polonia, Italia, Francia, Australia, Turquía, los países del norte de Europa y los países bálticos.
Roderich Kiesewetter, político experto en seguridad del partido democristiano alemán CDU, cree que el concepto propuesto "tiene sentido y es realista en cuanto Ucrania haya recuperado su integridad territorial". La pertenencia a la OTAN debería "seguir siendo un objetivo para Ucrania", dijo Kiesewetter a DW.
Garantías creíbles y vinculantes
Para el politólogo Johannes Varwick, de la Universidad de Halle, el concepto es "un planteamiento sensato para el 'tiempo después'. La dificultad de las garantías de seguridad radica en el hecho de que, por un lado, tienen que ser creíbles para que sean útiles para Ucrania. Por otro lado, debe ser vinculante a la cláusula de asistencia mutua en el artículo 5 del Tratado de la OTAN, para que sea aceptable para Rusia".
Además, y a medida que transcurre la guerra, el Gobierno ucraniano aumenta sus expectativas con respecto a su propia seguridad en el futuro: es imprescindible ser miembro de la OTAN. Esta insistencia puede ser el fruto de la reunión del G7 en Alemania a finales de junio de 2022, donde los jefes de Estado y de Gobierno manifestaron que estaban preparados "para acordar medidas de seguridad a largo plazo para ayudar a Ucrania a la hora de defenderse”.
Johannes Varwick no comparte la opinión del político Kiesewetter, porque Rusia nunca lo aceptaría: "Deberíamos tachar el tema de la OTAN de la agenda. La promesa de adhesión a la OTAN en 2008 fue un error, e incluso en la actualidad ese debate genera más problemas de los que resuelve".
Medvedev: las garantías son "preludio de la Tercera Guerra Mundial"
Hay declaraciones contradictorias sobre si Rusia está lista para entablar nuevas negociaciones tras la reciente ofensiva ucraniana. Lo que sí está definitivamente claro es que el concepto de garantías de seguridad internacionales levantó ampollas en Moscú. El antiguo presidente ruso, Dmitri Medvedev, dijo al respecto que es "el prólogo de la Tercera Guerra Mundial”.
El canciller alemán, Olaf Scholz, no percibe que Rusia quiera volver a negociar. Tras una pausa de tres meses y medio, volvió a hablar con Vladimir Putin: "Lamentablemente, no puedo decirles que ahora se ha llegado allí a la conclusión de que fue un error comenzar esta guerra".
El secretario general de la ONU, António Guterres, también expresó su desilusión después de hablar por teléfono con Putin. "Sería ingenuo pensar que estamos cerca de la posibilidad de un acuerdo de paz". Así que la idea sobre el orden de posguerra en Ucrania seguirá siendo, con toda probabilidad, pura teoría.
(rmr/ms)