Un clásico de la moda: el traje de baño al paso del tiempo
Los bikinis ya no podían ser mucho más diminutos. Por eso cobra fuerza la tendencia hacia los trajes de baño de una sola pieza, con cortes refinados y diseños de armonioso colorido. No siempre fueron así…
Tonos frescos para el verano
Tersos y de secado rápido: la búsqueda de los modistos por materiales adecuados a las necesidades de los clientes se intensifica. En la actual temporada han vuelto los trajes de baño de una sola pieza tanto para las damas que gustan de nadar, como para aquellas que prefieren echarse al sol. El bañador clásico desplazó desde hace tiempo al bikini como preferido en playas y piscinas.
Gracioso, pero poco práctico
Los primeros bañadores de una sola pieza y de cuerpo entero hicieron su aparición en el siglo XVIII, tanto para hombres como para mujeres. Entonces estaban hechos de lana espesa o de algodón, materiales que se tornan pesados al mojarse, y que se secan con dificultad. Se nadaba en estricta separación entre hombres y mujeres. En las piscinas populares se levantó más tarde la división por géneros.
Trajes de baño
Con el surgimiento del turismo, a principios del siglo XX, en Alemania se pusieron de moda los paseos a nadar en los lagos. Los bañadores se hicieron más estrechos y aparecieron los primeros modelos de materiales elásticos. Las cachuchas tenían la función de proteger del sol. La foto muestra los trajes de baño en boga para hombres y mujeres, cerca del año 1910.
Auge de los accesorios
Los dorados veinte trajeron consigo, por fin, un toque de elegancia: pequeños cinturoncillos, botones dorados y brillantes lentejuelas dieron a los bañadores detalles de suntuosidad. Los materiales eran apretados sobre el cuerpo y cortados directamente. No había modelos en tallas extra grandes.
"La Venus bañista"
La nadadora olímpica Esther Williams llamó la atención de Hollywood por su espectáculo acuático. Por la Segunda Guerra Mundial, la atleta no logró participar en los Juegos Olímpicos de 1940, y se ganaba la vida con sus presentaciones. En su carrera histriónica destacó la cinta “La hija de Neptuno” y llegó a convertirse en una de las mujeres más ricas de Hollywood.
El esplendor de Marilyn Monroe
Las famosas curvas de la diva Marilyn Monroe lucían en todo su esplendor en traje de baño. Además de éste, solo llevaba puestas dos gotas de Chanel Nr. 5 al posar para los fotógrafos. Sus primeros éxitos ante la cámara los alcanzó en los años 40, como modelo del famoso calendario Pirelli, antes de convertirse en actriz y leyenda.
Miss Germany
En los años 50, en los concursos de belleza no podían participar mujeres divorciadas. La apariencia de las candidatas era celosamente cuidada. La foto, tomada en 1956 muestra a las aspirantes con zapatos altos y trajes que resaltaban las formas femeninas. Los cortes de cabello lucían pronunciadas olas, no muy aptas para darse un chapuzón.
Gorros que son un arte
En los años 60, se pusieron de moda los gorros de baño floridos y creativos. Eran indispensables para divas como Gina Lollobrigida, que aquí aparece junto con un joven Sean Connery. Los bañadores de copa prefabricada y los gorros impermeables eran accesorio indispensable en cualquier bolso de natación.
La moda de Malibú
La serie estadounidense Baywatch (conocida como 'Los guardianes de la bahía' o 'Los vigilantes de la playa') escribió historia en cuanto a los trajes de baño. Los trajes de las protagonistas, de corte extremadamente alto en la pierna, se pusieron de moda en todo el mundo a principios de los años 90. Pamela Anderson llevó los bañadores a su expresión más desafiante, y se hizo famosa en 144 países.
¿Y dónde quedó el bikini?
El mayor dilema para los modistos consiste en definir cuanto material utilizar. Las fronteras entre un bikini y otro tipo de bañador a veces son indefinibles. En la pasarela de la Fashion Week de Miami se presentó este modelo retro, para la temporada 2011.