Un cubo con sabor a hogar
19 de agosto de 2005No sorprende que la genial idea haya sido desarrollada por estudiantes de la Universidad Técnica de Munich, una hermosa ciudad al sur de Alemania con ciertas desventajas, por ejemplo la escasez de vivienda pagable. El problema resulta tanto mayor para los jóvenes estudiantes. Pero aunque escasos de capital, han demostrado que les sobra el ingenio.
La idea del pequeño cubo vivienda resultó de una tarea propuesta por el arquitecto británico Richard Horden a sus estudiantes de la materia de Desarrollo de Productos y Arquitectura. Encargó a los estudiantes de la Universidad Técnica de Munich desarrollar una mini vivienda en cooperación con estudiantes de arquitectura del Instituto Tecnológico de Tokio, con los que mantuvieron contacto vía videoconferencia.
Los estudiantes se beneficiaron de la gran experiencia japonesa en el uso de áreas. El resultado: un cubo compacto y elegante por fuera, y de gran comodidad por dentro. Un modelo que se deja ver.
Solución elegante y ecológica
Las paredes son de aluminio liso que le da al cubo un aura especial y una atmósfera de tranquilidad. Pero no sólo es bello a la vista, también resulta ecológico. El cubo no toca el suelo pues el concepto prevé perjudicar lo menos posible la naturaleza. Se encuentra sobre pedestales. Para Richard Horden una de las principales características de arquitectura exitosa es la luminosidad y la ligereza de los materiales.
El volumen del pequeño cubo es escaso, poco material y construído para reducir al máximo el consumo de electricidad. Como influye minimamente en su entorno fomenta la relación de su inquilino con la naturaleza.
Incluso hay lugar para invitados
Cuatro ventanas de dimensiones distintas posibilitan la vista en todas direcciones. Están ubicadas de tal forma que resaltan la sensación de un domicilio con distintas habitaciones. Los muebles son en parte plegables. Así en el área de entrada se encuentra también el baño y en el área comedor, se trabaja y descansa, y además se duerme, pues se pueden levantar dos camas con lugar para cuatro personas.
El pequeño cubo está equipado con técnica moderna: conexión de Internet, estéreo, televisión integrada de pantalla plana, enchufes bien situados y moderna cocina. Puesto que el cubo tiene sólo 2,6 metros de largo se le puede trasladar rápida y fácilmente.
¿Asequible para estudiantes?
El prototipo no resultó justamente barato. Costó medio millón de euros. Pero se prevé que su construcción en serie abarate el precio a sólo 25.000 euros por unidad habitacional. Estas se pueden combinar y crear asentamientos.
A partir del próximo semestre los universitarios lo pondrán a prueba. Algunos voluntarios vivirán durante un semestre entero en los pequeños contenedores que estarán situados en las cercanías de la universidad. Y si no mueren en el intento… estos cubos pronto podrían convertirse en parte del panorama arquitectónico de la ciudad.