Ute Lemper: "Adoro cantar en español"
21 de junio de 2013Ute Lemper es un animal escénico. Desde hace dos décadas vive en Nueva York, desde donde mira su carrera jalonada por los éxitos. Y le queda mucho por hacer. La actriz y cantante, que en sus inicios conquistó por sus interpretaciones de canciones de cabaret, acabó haciendo las delicias del público cantando en francés, inglés y, desde hace algunos años, también en español. Su último proyecto está dedicado al poeta chileno Pablo Neruda.
Deutsche Welle: Obama acaba de visitar Alemania, ¿qué canción de su extenso repertorio le cantaría al presidente de su país de acogida?
Ute Lemper: Algo norteamericano, como "All that jazz", del musical Chicago, por ejemplo.
¿Y qué le parece alguna canción del poeta Charles Bukowski, a quién tiene usted todo un espectáculo dedicado?
Sí, ¿por qué no? Sus textos hablan de las compañías petrolíferas, de la sociedad norteamericana...
¿Qué le cantaría a Merkel?
Quizá la "Balada de Mackie el Navaja"... Las canciones con texto de Brecht siguen teniendo mucha actualidad, hablan de capitalismo, de explotación...
¿Y qué canción podría describir la situación de los países del sur de Europa afectados por la crisis?
¡Oh, Dios mío...! No sé, no soy una artista política... Sería fácil decirles: "No perdáis la esperanza, seguro que vuestra situación mejorará pronto", pero, lamentablemente, no parece que eso vaya a suceder. Todo apunta a que va a ser un largo camino lleno de sufrimiento y con una desastrosa situación económica.
Suele usted cantar versos de poetas comprometidos, como Brecht y Neruda. ¿Cree que sus textos podrían aplicarse a la situación actual?
Sí, en el sentido de que Brecht y Neruda persiguieron una sociedad más libre, en la que tuvieran cabida la humanidad y la justicia. No necesariamente un sistema marxista, que al final ha resultado ser equivocado.
Desde hace años canta usted tango y ahora está embarcada en un proyecto alrededor de Neruda. ¿Qué le atrajo de la cultura latinoamericana?
Fue una evolución natural. Recorrí el repertorio europeo pasando de la canción alemana a la francesa y después a la norteamericana. Al principio, me interesé solamente por Astor Piazzola, ya que era un compositor internacional, que colaboró con artistas europeos, vivió en Nueva York, escuchó jazz, llevó el tango a Europa y abrió este género al mundo. Incluso llegué a conocerlo en París en los años 80, cuando yo era muy joven. Me atrevo a cantar Piazzola, pero no cantaría nunca el tango tradicional argentino tal y como se interpreta en aquel país. Escribir música, crear mis propios proyectos, es algo que me llena de satisfacción, así que cuando anduve buscando textos para escribir nuevas canciones, descubrí casualmente a Neruda y pensé que podía poner mis manos sobre aquellos versos. Para ello colaboré con un compositor argentino. Fue un bonito trabajo poner música a sus poemas.
¿Encuentra difícil pronunciar el idioma español?
Cantarlo no, el problema es hablarlo. Aprendí francés viviendo en Francia e inglés residiendo en EE. UU., pero nunca he vivido en un país de habla hispana. Lo entiendo bien, pero no lo hablo con fluidez. Es una lengua maravillosa, llena de melodía y expresividad. Adoro cantar en español.
Además de conocer a Piazzola, tuvo un encuentro telefónico con Marlene Dietrich...
Fue en 1987, justo en un momento en el que mi carrera estaba experimentando su primer gran auge. Tenía mucho éxito y miles de personas venían a ver mis actuaciones. Entonces estaba haciendo Cabaret y en Francia me otorgaron el "Premio Moliere" de teatro. Dietrich había oído hablar de mí y trató de ponerse en contacto conmigo. Previamente, yo le había escrito una carta, porque todo el mundo me comparaba con ella, diciendo: "Oh Dios mío, es la nueva Marlene Dietrich". Yo tenía entonces 23 años y no creía en absoluto que nos pareciéramos. La comparación me parecía casi insultante para ella. Le escribí una carta y a ella le gustó. Me llamó por teléfono y mantuvimos una larga conversación sobre la vida en general, sobre la profesión, sobre su complicada relación con Alemania...
Tengo entendido que su relación con Alemania también es complicada...
Sí, esa es una larga historia con muchos capítulos... Los momentos más difíciles tuvieron lugar en los años 92 y 93, después las aguas volvieron a su cauce. Ahora sé que me adoran, pero, ciertamente, no siempre fue así. Yo no soy rencorosa y miro siempre hacia adelante, suelo dejar las emociones negativas de lado. Cuando voy a Alemania, trato de viajar como a cualquier otro país. Hago mi trabajo, que me apasiona, y al público alemán le gusta...
Dietrich tuvo una actitud política comprometida...
¿Se refiere a que cantó para los soldados en la Segunda Guerra Mundial?
Sí, y también después...
Sé que en su casa en Hollywood mantuvo contacto con intelectuales y escritores americanos. Llevó al propio Neruda para hacer una lectura pública de sus poemas. Desde luego, reflexionaba sobre el mundo y meditó la posibilidad de volver a Alemania. Obviamente, ese era su país y sus propios compatriotas no querían que volviera. Eso debió de ser para ella muy doloroso. Al final prefirió vivir en la libertad de los EE. UU. que en la Alemania de postguerra.
¿En qué idioma hablaron?
Hubo un poco de todo: inglés, francés, algo de alemán... Siempre con su acento "Marlene".
Este verano lleva de gira su espectáculo "Último tango en Berlín", un título que evoca ambientes muy distintos.
Sí, el show alude tanto el éxodo que se produjo en Berlín antes de la toma de poder de los nazis como al sensual contexto inspirado en la famosa película de título casi idéntico. Y, naturalmente, está el tango. En este espectáculo incluyo repertorio con mucha libertad. Me gusta, sobre todo, cuando estoy solo con dos músicos: bandoneón y piano, creando un escenario íntimo y lleno de emoción. Al mismo tiempo, es la historia de mi vida: como soy una ciudadana del mundo, me siento profundamente conectada con las canciones.
Irá pronto de gira por Latinoamérica con su nuevo proyecto Neruda, ¿no es así?
El espectáculo que acabo de estrenar en Londres se basa en su poesía. Pronto saldrá un CD con las canciones y estoy emocionada, porque es nueva música, mi música, y está muy cerca de mi corazón. Pronto haré una gran gira por Latinoamerica. En otoño estaré en Brasil, Ciudad de México, Buenos Aires, Córdoba Rosario... Y en enero hay un importante concierto en Chile, que me hace especial ilusión porque Neruda era de allí.
Autora: María Santacecilia
Editora: Claudia Herrera Pahl