La oposición en Venezuela: su división perpetúa el régimen
31 de agosto de 2020El presidente Nicolás Maduro convocó a elecciones parlamentarias el próximo 6 de diciembre. Un desafío que sume a la oposición en una división aún más profunda, a pesar de proclamar un objetivo común: "el fin de la dictadura”, la meta que recalca el parlamentario en el exilio, Julio Borges, Comisionado presidencial para la Relaciones Exteriores de Venezuela, nombrado por Juan Guaidó.
"Si esas elecciones tienen lugar, Nicolás Maduro va a hacerse con la mayoría en la Asamblea Nacional, que es lo que busca”, dice a DW la politóloga Sabine Kurtenbach, directora de investigaciones del Instituto Alemán para Estudios Globales (GIGA), con sede en Hamburgo, quien dice que hay que tener en cuenta que "Maduro ha cambiado las reglas del juego favoreciendo a candidatos y partidos pequeños leales al régimen por lo que obtendrán escaños en la Asamblea; por eso, la oposición que busca un cambio de gobierno no tendrá ninguna posibilidad de ganar”.
27 partidos opositores: "No convalidar el fraude”
Así lo ven los 27 principales grupos de la oposición venezolana que acordaron boicotear las próximas elecciones legislativas, considerando que "los comicios serán manipulados por el partido de gobierno, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), y que participar equivaldría a "colaborar con la estrategia de la dictadura".
Una conclusión a la que también llegan tanto Kurtenbach, como el politólogo Detlef Nolte, de la Universidad Hamburgo, quien explica a DW que "la oposición no tiene éxito, entre otras razones porque enfrenta a un régimen que está dispuesto a todo para mantenerse en el poder”. El profesor también advierte que "así el régimen opere con métodos no democráticos, la oposición no puede ni debe hacer lo mismo, a pesar de toda la frustración”.
Si bien tanto Hugo Chávez como Nicolás Maduro han sabido manipular, debilitar y enemistar más a la diversa oposición venezolana, la responsabilidad de su división, y consiguiente falta de éxito recae en esta misma. Y ese fracaso se debe, entre otros factores, a que "en la oposición venezolana se lo juegan todo, no tanto por defender la democracia, sino los intereses personales”, considera la politóloga Sabine Kurtenbach, quien agrega que, Juan Guaidó logró una convocatoria popular que se desgastó demasiado rápido y no hay, hasta ahora, otra figura que pueda relevarlo.
¿Qué pasará cuando se vaya Maduro?
Para la profesora de la Universidad de Marburgo, hay varias cosas por las que la oposición venezolana no logra sus objetivos, algo también observado en otros países: "Aparte de que quiera que Maduro se vaya, la oposición no tiene un programa común, un plan conjunto para después”. Un punto clave que puede generar la confianza que la oposición requiere. "En Nicaragua empezaron las peleas una vez cayó Anastasio Somoza (1979). En Venezuela, las peleas entre los opositores empezaron mucho antes”, apunta Kurtenbach. Además, como segundo punto, "la oposición venezolana no se pone de acuerdo sobre cómo sacar a Maduro del poder: están quienes quieren pactar con él; otros siguen apegados a las formas democráticas, y existen lo que no descartan la vía de la fuerza, como María Corina Machado”.
Una tercera falla de la oposición es la otra fuente de discordia interna, según Sabine Kurtenbach: "El deseo sin freno de sus distintos líderes de querer figurar, en forma oportunista, dejando una y otra vez en claro que una vez Guaidó haga el trabajo de sacar a Maduro, sus propias ambiciones de poder seguirán vivas”. Peor aún, analiza la científica: "Esos mismos líderes han profundizado las brechas de la división con su demostración de mesianismo del corte de que ‘yo soy el único -o la única- que puede lograr el cambio de gobierno”.
Además de lo anterior, "la oposición no logra ningún consenso sobre lo que debería pasar con el partido chavista, que cuenta con líderes que aún representan a una parte importante de la población, así ya no convoquen a las mayorías”, agrega la profesora. A esto se suma que "la oposición habla de superar la dependencia del petróleo, pero nadie dice cómo hacerlo”, observa Sabine Kurtenbach, una de las más reconocidas estudiosas de América Latina en Alemania.
"Corina Machado le hace el mayor favor a Maduro”
Pero "la líder María Corina Machado le hace el mayor favor a Nicolás Maduro hablando de intervención militar, porque es lo que más le conviene al régimen”, advierte Sabine Kurtenbach. Y explica que eso "le da la perfecta justificación a Maduro de que las verdaderas amenazas para Venezuela vienen desde fuera”. Una estrategia tan contraproducente, que "Guiadó, tras cometer sus propios errores, la ha descartado porque ha visto que no le conviene”.
"No lleva a nada el discurso de ‘intervención militar', a sabiendas de que ningún país está dispuesto a ejecutarla, y de que mientras las Fuerzas Militares estén detrás de Maduro el régimen no caerá”, dice, por su parte, el profesor Nolte. El académico reconoce las grandes dificultades que genera "la inteligente estrategia de división de la oposición por parte del régimen, que mete o saca de la cárcel de forma selectiva a opositores para crear más discordia". Este 31 de agosto, el Gobierno de Venezuela "indultó" a varios diputados opositores presos o exiliados y a periodistas y actores sociales detenidos o acusados de diversos delitos.
¿Quién y cómo desarrollar la transición?
Tampoco la oposición de Venezuela se pone de acuerdo sobre la propuesta de pactar con el chavismo un tiempo de transición. Mucho, empero, es susceptible de cambiar después de una decisión de impacto global: las elecciones presidenciales del 3 de noviembre en Estados Unidos.
"En vista de que los partidos de la oposición se han alejado de la gente, las iniciativas y movimientos civiles son una esperanza en Venezuela, aunque a largo plazo, toda vez que aún son muy pequeños y necesitan mucho apoyo”, reconoce la investigadora. Ella apuesta por las iniciativas de la sociedad civil "para un cambio pacífico”.
Por último, la politóloga concluye que "mientras la oposición no supere sus divisiones, representa la mejor garantía para la perduración del régimen de Nicolás Maduro en el poder”.
(er)