Ver el cine en clase

Desde clásicos como "Nosferatu" hasta la futurista "Blade Runner", un total de 35 películas harán ahora su entrada a las aulas escolares alemanas. Es lo que decidió una comisión integrada por 19 críticos de cine, realizadores, historiadores del arte y expertos en educación, convocados por la Central federal de Formación Política (BPB en sus siglas en alemán).

La selección no fue fácil, como refleja que el número de películas seleccionadas, que aumentó durante las deliberaciones en 10 hasta alcanzar la cifra final.

Imagen en movimiento

"A pesar de que la imagen en movimiento haya sido uno de los medios universales que marcaron el siglo XX, su importancia no se refleja en los programas escolares, como ocurre por ejemplo con la literatura", explica el presidente de la BPB, Thomas Krüger.

Las 35 películas fueron seleccionadas de una lista de 271 largometrajes. No se repiten los directores y se trató de incluir todos los géneros fílmicos que sean representativos para la historia del cine. La idea de base es la de "despertar el apetito por el cine" desde los primeros años en la escuela.

Krüger desea que Alemania siga el ejemplo de Francia y de Suecia, donde el cine tiene el rango de asignatura escolar. Esto aun sería demasiado pedir para Alemania, por su estructura federal, que requiere el consenso de los ministros de cultura de los 16 estados federados que la componen. Pero al menos se puede incluir como apartado dentro de las materias culturales.

¿Clásicos o elitistas?

Las películas incluyen producciones realizadas entre los años 50 y 80, ya que "las películas deberían haber demostrado su calidad al menos durante una década", explica Helmut Pinzler, director del Museo del Cine de Berlín. Una de las pocas excepciones es "Todo sobre mi madre", del español Pedro Almodóvar, del año 1999 y ganadora del Oscar a la mejor película extranjera.

Otro énfasis está en producciones alemanas, con ocho películas seleccionadas, de directores como Volker Schlöndorf ("El tambor de hojalata") o Rainer Werner Fssbinder ("El matrimonio de María Braun"). Los excluidos son algunos directores del llamado "cine industrial", como Steven Spielberg, George Lucas o James Cameron, aunque tampoco se consideró a Woody Allen.

Así, mientras que la iniciativa sin duda será bien recibida por la opinión pública alemana, los criterios aplicados a la selección podrían provocar un conocido debate sobre empresas culturales alemanas, muchas veces acusadas de ser demasiado elitistas y alejadas de los gustos populares.