El poeta más famoso de Alemania vivió cincuenta años en su casa de Weimar, que hoy día forma parte del museo nacional de Goethe. Gracias a su amistad con el conde Carlos Augusto, Weimar se convirtió en el siglo XVIII en un centro cultural floreciente, algo que se hace evidente en la biblioteca de la condesa Ana Amalia. Goethe estuvo mucho tiempo al mando de la biblioteca. El parque del Ilm, que veía desde la ventana de su casa, se convirtió en una fuente de inspiración para el escritor. Otros artistas que también dejaron su impronta en Weimar fueron Friedrich Schiller, al igual que Goethe un representante del Clasicismo de Weimar, y el compositor Franz Liszt. Walter Gropius marcó la era moderna de Weimar cuando creó la escuela de la Bauhaus en 1919, cuya tradición se sigue conservando en la Universidad Bauhaus de Weimar.