A 60 años, el legado de Brecht todavía conmueve
16 de junio de 2009Cinco años después de su creación, en 1954, la compañía se muda al Teatro en Schiffbauerdamm de Berlín y, desde entonces, siempre ha permanecido allí. Pero todo lo demás ha cambiado. En la etapa post-reunificación las disputas sobre la propiedad y la dirección de la compañía estaban a la orden del día, y el teatro cerró durante un año en 1999. Un año después, Claus Peymann, el decano del renombrado Burgtheater de Viena y conocido innovador, fue nombrado director.
No es un mausoleo
A través de su carrera, Peymann causó controversia con un estilo de producciones que atraían tanto la indignación del público como su aplauso. Ha sido siempre el motor del Berliner Ensemble y lo mantuvo firmemente dentro de la vanguardia del teatro innovador siguiendo la visión de Bertolt Brecht.
Sin embargo, sus detractores sostienen que el Berliner Ensemble es algo así como un mausoleo. Las obras de Brecht siguen siendo la médula del repertorio, aunque Peymann sazona el programa con los clásicos, desde Samuel Beckett hasta August Strindberg y Heinrich von Kleist.
Pero toda lo que pueda dejar una pátina antigua se borra gracias a las producciones que llaman la atención del público, como la de la dramaturga francesa Yasmina Reza, “El dios de la matanza”, o “The Sonnets”, de Robert Wilson, uno de los espectáculos de los que más se habla en Berlín. Y por la participación del extravagante cantante y compositor Rufus Wainwright.
En abril, Peymann dijo al periódico Die Welt que en los últimos ocho años un 20 por ciento de las puestas teatrales fueron estrenos, y que un 58 por ciento del programa son obras contemporáneas.
No obstante, el caballito de batalla del jefe de la compañía sigue siendo el teatro épico. Junto a “La ópera de tres centavos” y “El irresistible encanto de Arturo Ui”, un éxito perenne es “Madre coraje”.
La mayor obra antibélica de todos los tiempos
Escrita por Bertolt Brecht en 1939 como un intento de combatir el ascenso del fascismo y del nazismo, “Madre Coraje y sus hijos” es la historia de una mujer tratando de mantener con vida a su familia y a su negocio ambulante durante la Guerra de los Treinta Años en Europa. Hoy en día está considerada como la mayor obra antibélica de la historia del teatro.
Algunos de los actores de teatro alemanes más respetados son miembros desde hace años del Berliner Ensemble. Uno de ellos es Carmen-Maja Antoni, en el rol de Madre Coraje en la última producción. Esta actriz, que apareció por primera vez en televisión en Alemania del Este a la edad de once años, tiene hoy 68 años. Se unió a la compañía en 1976, y uno de sus primeros roles fue el de Kattrin, la valiente hija en Madre Coraje. Hoy, el papel de Kattrin lo representa Christina Drechsler, de 28 años.
Los actores dicen que, a pesar de haber participado de la puesta durante más de tres años, siempre hay diferentes aspectos que descubrir. “Todos los días se dan situaciones nuevas, y tenemos nuevas ideas sobre las escenas”, comenta Carmen-Maja Antoni. “Cada noche es una nueva obra”. Y Christina Drechsler apunta que la estructura de las escenas es la misma, pero los sentimientos van cambiando con el pasar de los años.
Según Antoni, cada director tiene un estilo diferente y una visión personal de Brecht, y eso es un desafío para ella como actriz.
Eso es también lo que desafía a la audiencia. La dramaturga Jutta Ferbes trabaja en el Berliner Ensemble y concuerda con que lo que atrae a la gente al teatro es una combinación inspiradora de directores, actores y escenógrafos. Para todos los que dicen que la caída del Muro de Berlín y el colapso del comunismo en Europa del Este han convertido en obsoleto a Brecht, ella tiene lista una respuesta: “Brecht es uno de los más grandes escritores, y tiene corazón”. Y prosigue: “Brecht es todavía muy importante para la gente. Sus obras son buenas y todavía relevantes”.
Ferbers confía en que la compañía tiene futuro a pesar de los desafíos constantes, los cierres y los recortes de presupuesto. “Espero que aún en estas épocas tan duras tengamos suficiente dinero y audiencia como para continuar produciendo buen teatro”, dijo.
Peymann, el provocador
En gran parte gracias a su director artístico, quien tiene el hábito de acosar verbalmente al alcalde de Berlín, Klaus Wowereit, sobre la escasez de subsidios para arte y cultura, el teatro está en buena forma, económicamente hablando. Y seguramente no es de perfil bajo. Siendo una compañía que sale de gira, el Berliner Ensemble llevó “Madre Coraje” al Festival Fadj de Teherán en 2008. Fue una puesta controvertida. Sus críticos dijeron que la decisión de Peymann de visitar Irán legitimaba el antisemitismo del presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad.
Varios meses más tarde, Peymann volvió a los titulares al ofrecer una beca a un ex terrorista. Luego de 26 años detrás de las rejas, Christian Klar, uno de los líderes de la segunda generación del grupo terrorista Fracción del Ejército Rojo (RAF), fue invitado a formarse como técnico en la compañía.
Bertolt Brecht, el padre fundador, probablemente lo hubiera aprobado. Sesenta años después de que se creara la compañía, Claus Peymann aún sigue cambiando la sociedad con los mismos bríos que su predecesor.
Autor: Cheryl Northey/ Jane Paulick
Editor: Enrique López