La Policía en la mira por casos de extremismo de derecha
15 de julio de 2020En 2020, la exitosa autora de sátira política Idil Baydar, que critica el racismo cotidiano en Alemania, recibió una amenaza de muerte firmada por un supuesto "SS-Obersturmbannführer", que se podría traducir como jefe superior de la unidad de asalto de las Escuadras de Protección nacionalsocialistas, una organización al servicio de Adolf Hitler responsable de la organización del genocidio judío, de terror y muerte.
Su caso no solo es alarmante, sino políticamente explosivo, puesto que la pista del autor del delito conduce directamente a la Policía germana. La carta con la amenaza de muerte contra Idil Baydar contiene informaciones personales, a las que se tuvo acceso desde una computadora de la Policía del estado federado de Hesse.
Computadora de la Policía
Baydar no es el primer caso de este tipo: ya desde 2018, varios políticos de izquierda han recibido correos con amenazas similares. También en estos casos, las víctimas fueron espiadas a través de computadoras de la Policía de Hesse. Actualmente, la Fiscalía investiga el caso. El martes pasado (14.07.2020) un presidente de la Policía renunció a su cargo. También el ministro del Interior de Hesse, Peter Beuth, está bajo presión. El político no descarta la existencia de una red de derecha en la Policía, y anunció el nombramiento de un investigador especial.
Los casos desataron un debate en Alemania: ¿Hay racismo estructural en la Policía? ¿Existen redes de extrema derecha que han infiltrado el Estado? Para el vicepresidente del sindicato policial, Jörg Radek, la respuesta es clara: "No hay racismo estructural en la Policía alemana". En entrevista con DW, sostiene que se trata de casos aislados de racismo o de extrema derecha. Si bien el sindicato goza de un amplio respaldo a nivel político, a raíz de las protestas masivas en Estados Unidos por la violencia racial por parte de policías, también en Alemania aumenta la presión sobre las agencias de seguridad.
¿Casos aislados?
La lista de casos inquietantes es larga. En el norte de Alemania, un agente de la Policía Criminal creó un grupo de chat de extrema derecha. Los miembros tienen listas de llamados "enemigos" en las que figuran los nombres de miles de políticos, periodistas y activistas. En sus registros, la Policía encontró armas, granadas aturdidoras y 50.000 municiones. Según informaciones del policía detenido, al grupo pertenecen muchos más policías y soldados.
Asimismo, en las academias policiales de Berlín y Brandeburgo se multiplican las pintadas con esvásticas y lemas islamófobos. Además, en varios casos espectaculares de criminalística en las últimas décadas, la Policía ha destacado por sus investigaciones parciales, en las que muchas veces las víctimas migrantes eran consideradas sospechosas, en lugar de recibir ayuda.
El caso más conocido es la serie de asesinatos de la organización terrorista Clandestinidad Nacionalsocialista (NSU, por sus siglas en alemán). Entre los años 2000 y 2007, el grupo terrorista de extrema derecha asesinó a nueve inmigrantes y una policía. Durante mucho tiempo, las autoridades de seguridad sospecharon de las familias de las víctimas. Apenas el suicidio de dos miembros de la NSU, en 2011, puso fin a los crímenes.
Desde hace años, grupos de derechos civiles en Alemania critican que la discriminación diaria de gente negra y mestiza no se tome en serio. Tahir Della, de la iniciativa Personas Negras en Alemania, sostiene que se ignora el racismo anclado en las instituciones.
La mayor amenaza para la seguridad
En Alemania, hacen falta números concretos sobre la estructura y las dimensiones de las posiciones racistas en la Policía. Apenas hace poco, el ministro del Interior, Horst Seehofer, rechazó un estudio sobre el llamado "racial profiling", es decir, la práctica de controlar a personas tan solo por el color de su piel. Y eso, a pesar de que el Consejo de Europa había recomendado un estudio al respecto a los alemanes.
El nueve de julio pasado, Seehofer presentó el informe de los servicios secretos alemanes para 2019. De acuerdo con el documento, hay un fuerte aumento de tendencias antisemitas, de extrema derecha y racistas en el país. El ministro calificó el extremismo de derecha como la mayor amenaza para la seguridad en Alemania.
(vt/ers)