Argentina: pionera y revolucionaria
2 de octubre de 2010“El diario El Mercurio en Chile regala periódicos en el metro y en los tranvías para fomentar que la gente lea”, señala el experto Alfonso de Toro al aludir el principal desafío de las políticas culturales de los países de América Latina: promover el hábito de leer cualquier tipo de literatura, incluso el periódico.
“Desde México hasta Argentina el problema fundamental de los periódicos es que se mantienen gracias a los subsidios. Son periódicos sin lectores, es una tragedia”, dice lapidario de Toro, en conversación con Deutsche Welle. El especialista se queja de que la falta de hábito de la lectura no sólo se traduce en una caída en las ventas de libros, sino que tiene otros efectos secundarios: problemas de distribución y vicios en las decisiones editoriales que acaban por implantar políticas mercantilistas en su afán de vender.
“Se preguntan qué libro se venderá en un país o en una región determinada del mundo”, dice y explica que ese tipo de estrategias se emplean para vender perfumes, coches o ropa. “Así funciona la decisión editorial ante las novelas, lo que reduce mucho las posibilidades de los autores si su obra no cabe en ese formato”, se queja.
Problemas de distribución
El catedrático, que dirige el Seminario Iberoamericano de Investigación de la Universidad de Leipzig y es un experto en la obra de Jorge Luis Borges, ilustra el problema de la distribución con un ejemplo. “Acabo de estar en Chile y no pude encontrar novelas Best Seller en las grandes librerías chilenas. Hay que buscarlas en Europa, en España, porque fueron editadas aquí. Si se publican en Alfaguara o Planeta de Buenos Aires, de Santiago de Chile o Caracas, esas novelas tienen un acceso muy difícil. Es un problema económico el que hay en Latinoamérica y de eso se quejan todos los autores y los actores políticos culturales. Y eso se deriva de que hay muy poca lectura", advierte.
De Toro lamenta que pese a que América Latina haya producido figuras literarias de rango mundial el tiraje de libros en el subcontinente siga siendo tan bajo en comparación con el existente en Europa. “Alemania es el país en donde se venden más libros. Aquí se lee mucho porque hay un hábito de la lectura que comienza desde la infancia y hay librerías en el pueblo más recóndito”, apunta.
En ese sentido, de Toro se muestra escéptico de que el enorme esfuerzo que ha emprendido el Gobierno argentino al traducir a sus autores a través del Programa Sur tenga un efecto en la política editorial de largo plazo. “En América Latina hay muy pocas editoriales independientes, la mayoría pertenecen a los grandes consorcios globales como el Grupo Planeta, que tienen su casa matriz en España”, subraya.
La literatura: lo mejor que tiene Argentina
Sin embargo el experto cree que la llegada de Argentina a la Feria del Libro de Fráncfort es una oportunidad para que el país se presente con otra cara distinta a la del desastre económico y las turbulencias políticas que lo han marcado recientemente.
“La invitación a Fráncfort le permite a Argentina mostrar quizás lo mejor que tiene, que es la literatura”, dice. El experto añade que la nación sudamericana llega además en representación de un continente, que aunque parece haber perdido el brillo que tuvo durante las décadas del boom latinoamericano, tiene una gran fuerza literaria con autores de primera categoría. “El más expuesto actualmente es Roberto Bolaño, pero como él hay otros autores magníficos“, subraya de Toro y a manera de ejemplo menciona los nombres de Arturo Fontaine y Carlos Franz que, aunque han escrito grandes novelas no han llegado al gran público e incluso no han sido traducidos al alemán.
Partiendo desde la literatura el país del Cono Sur revisa su pasado y la dictadura militar, algo que ni España misma ha hecho aún. En eso dice de Toro, "Argentina se muestra revolucionaria y pionera, pues va a sus íconos fundamentales, a Borges y a Cortázar para desde ahí hacer un recorrido por la época contemporánea. El tema de la memoria se encuentra muy presente en los autores argentinos. Partiendo de la estética de la literatura, el concepto de los organizadores no ha dejado a un lado la terrible dictadura argentina. Así que el país aporta una ética determinada donde los autores y los literatos son una fuerza fundamental”, concluye.
Autora: Eva Usi
Editora: Emilia Rojas Sasse