Cambio en gerencia de Volkswagen crea confusión
8 de noviembre de 2006A pesar de tener contrato hasta 2012, presentar “éxitos” en su programa de adelgazamiento del consorcio y de lanzar un modelo que vende, Bernd Pischetsrieder, el gerente general de Volkswagen se va y delega a un amigo en su cargo: Martin Winterkorn
"ForMotion" es el elegante nombre para el duro plan de austeridad que puso en marcha Pischetsrieder y que empieza a dar “buenos resultados”. Aún así, el empresario se retira de VW. El casi sesentano Bernd Pischetsrieder es un apasionado de los autos. Él mismo los prefiere deportivos y veloces. Pischetsrieder trabajaba en BMW antes de llegar a la jefatura de VW.
Su llegada marcó la era de la modernización de Volkswagen como empresa y como marca automotriz. Con el lanzamiento de modelos nuevos Pischetsrieder le puso su sello a los “autos populares”, que ya no lo son tanto, pues su confort y precios están dirigidos a una clientela con mayor poder adquisitivo.
¿Quién sabe por qué se va Pischetrieder?
Lo único claro del cambio de gerencia en Volkswagen es que Bernd Pischetrieder se va y Martin Winterkorn lo reemplazará. Winterkorn es el actual jefe de Audi, otra de las más renombradas casas automotrices europeas. Ni los grandes accionistas de Porsche ni las autoridades alemanas se han querido pronunciar al respecto.
El jefe de Gobierno del estado federal de Baja Sajonia (sede de VW) Christian Wulff, sólo ha atinado a decir que espera que el sucesor de Pischetrieder “continué el camino exitoso de Volkswagen, tanto con sus nuevos modelos como con el programa de reestructuración”. El saliente empresario institucionalizó en Volkswagen temas como la ecología, la defensa del Medio Ambiente, así como nuevas formas de política de personal y dirigencia.
¿Lucha intestina de poderes?
Para algunos analistas de Volkswagen, la caída de Pischetsrieder es la consecuencia de la lucha de poderes internas, con Piech como el máximo rival. De acuerdo a medios alemanes, Piech dejó caer al presidente con ayuda de los delegados de los trabajadores en el seno del Consejo de Vigilancia.
Para otros analistas la empresa no está tan lúcida como se la ha querido hacerla a la opinión pública. El reemplazo al frente de Volkswagen se produce, según sindicatos laborales, en medio de una seria crisis de la marca, que obligó al constructor a lanzar un profundo programa de recortes y saneamiento que ha afectado tanto al personal como las cifras del balance.
En los primeros nueve meses del año, VW incrementó su facturación en casi un 12% y dio un salto positivo en el resultado operativo, pero a causa de los costos de saneamiento cerró en ese período con pérdidas por un monto de 1.700 millones de euros. En ese lapso, VW entregó a clientes y concesionarios 4,3 millones de vehículos, un 10,3 por ciento más que el año pasado.
Los analistas económicos
El momento de la salida de Pischetsrieder no deja ser sorprendente para algunos analistas económicos como los banqueros del Nord LB que, a su juicio, “es muy positivo que dicho gerente haya logrado despedir a casi 20.000 empleados”.
Pero la salida del alabado empresario no parece convencer a muchos en la bolsa. Las meras dudas sobre su abandono de Volkswagen han hecho caer acciones de Volkswagen que subían y subían en los últimos tiempos.