Eckert: por qué no fui reelegido por la FIFA
12 de mayo de 2017Simplemente, no fue propuesto para una reelección. Así de fácil privó de influencia el Consejo de la FIFA el miércoles en Bahréin a los presidentes de las dos cámaras de la Comisión de Ética, el alemán Hans-Joachim Eckert y el suizo Cornel Borbely. El jueves, el Congreso de la FIFA eligió a la colombiana María Claudia Rojas y al griego Vassilios Skouris como sucesores. En entrevista con DW, Eckert relata qué sucedió en Bahréin.
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DW: Sr. Eckert, ¿qué piensa sobre su no reelección?
Hans-Joachim Eckert: Estoy tranquilo. No tengo nada que reprocharme sobre los cinco años de actividades en la FIFA. Ya en un principio estaba claro que iba a ser una tarea difícil. Pero estoy algo defraudado por la falta de respeto hacia mi persona y mi trabajo. En el Congreso se me dijo que habíamos trabajado poco y demasiado lento. Yo contesto que para demostrar lo contrario basta con ver cuántos procedimientos llevamos a cabo en ese tiempo. Si la crítica se justifica o no, deben decidir otros.
¿Habló Gianni Infantino, presidente de la FIFA, con usted sobre su trabajo durante su tiempo en funciones o lo sorprende el giro que han tomado los acontecimientos?
No me dijo nada. Joseph Blatter, tampoco. Blatter dijo desde un principio que apoyaba la creación de la Comisión de Ética. Nunca se entrometió, tampoco cuando todo indicaba que sería destituido. También en ese momento se comportó en forma totalmente neutral, lo que lo honra, tanto humana como profesionalmente. En el caso de Infantino, el tiempo no alcanza para poder evaluarlo. Pienso que se informó sobre los procedimientos. Pero, nunca tuvo un contacto directo con nosotros.
¿Tampoco intentó explicarle lo que sucedió?
No, antes tampoco. Fatma Samoura, la secretaria general, dijo hace pocas semanas que apoyaba a la Comisión de Ética y que seríamos nuevamente nominados. Infantino no la contradijo.
¿Qué opina sobre la argumentación "menos europeos, más mujeres”?
Casi me divierte escuchar: "necesitamos una mayor distribución en el mundo” y luego se sustituye un alemán por un griego. Hasta ahora, siempre creí que Grecia pertenece a Europa, pero, evidentemente, tengo otra idea del mapamundi.
¿Qué significa su no reelección para el proceso de reforma de la FIFA?
Los nuevos disponen, sin duda, de la necesaria cualificación profesional. Pero no va a ser fácil proseguir con los procedimientos, ya solo debido al idioma. Por ejemplo, en el procedimiento en relación con el Mundial de Alemania 2006: todos los documentos están escritos en alemán. Y no son 200, sino miles de folios. Van a pasar, seguramente, meses, hasta que los nuevos puedan trabajar en forma realmente eficiente. No hay que olvidar que, menos dos, todos los integrantes de la Comisión son nuevos.
¿Cómo ve usted el papel de la Federación Alemana de Fútbol en esta historia?
Sé que Reinhard Grindel, el presidente de la Federación Alemana de Fútbol (DFB), dijo antes del Congreso que la DFB quería mantenernos a nosotros dos en la Comisión de Ética, porque "han hecho un buen trabajo y aportado mucho para que el proceso de reforma iniciado continúe por una buena senda”. El problema es que se votó una lista en bloque y no a favor o en contra de determinadas personas. El presidente de la FIFA presentó una lista en la que nosotros no figurábamos. El presidente de la DFB no podía rechazar toda la lista, pero merece mi respeto que se haya abstenido y no haya simplemente dicho que sí. Para que quede bien claro: no se trata de mi persona. Lo que me molesta enormemente y me duele es el poco respeto de los funcionarios de la FIFA, que no creyeron necesario informarnos sobre la decisión ni hablar con nosotros.
¿Está liquidada la FIFA para usted personalmente?
La FIFA es una organización mundial. Yo formé parte durante cinco años de su Comisión de Ética. Intenté devolverle la integridad, por el deporte y el fútbol. Queríamos darle a la FIFA la posibilidad de decir: estamos en condiciones de arreglar nosotros mismos nuestros problemas. Me parece que es una lástima que no podamos continuar con nuestro trabajo. Si la FIFA está liquidada para mí o no, es secundario. Hay otras cosas en la vida que la FIFA, para decirlo claramente.
Hans-Joachim Eckert, nacido en 1948, trabaja desde julio de 2015 como juez en la Audiencia Provincial de Múnich. Anteriormente, dirigió numerosos procesos de corrupción contra grandes empresas. Desde julio de 2012 fue presidente de la cámara jurídica de la Comisión de Ética de la FIFA, que suspendió, entre otros, al presidente de la FIFA Sepp Blatter y al presidente de la UEFA, Michel Platini.
Autor: Stefan Nestler (PK/DZC)