Los autistas, especialistas con potencial
3 de diciembre de 2012Los autistas con el trastorno de Asperger poseen valiosas aptitudes: tienen una gran capacidad analítica y de concentración, piensan de forma lógica y pueden desarrollar tareas que deben repetirse constantemente. Además, los autistas son apasionados por el trabajo detallado, la precisión y la alta calidad. Cualquiera pensaría que las empresas emplearían a alguien con semejantes cualidades. Pero no es así.
En Alemania hay 250.000 autistas con síndrome de Asperger. Este trastorno es una forma leve del autismo. Quienes lo padecen poseen, a su vez, las aptitudes antes mencionadas. Aún así, las oficinas de empleo los califican de “inhabilitados”.
Ignorados y subvalorados
Solo un 15 por ciento de los autistas con Asperger desempeñan un trabajo normal. La razón: estas personas tienen dificultades para adaptarse a un medio social. Y las empresas exigen, además de aptitudes técnicas, la capacidad social y emocional para trabajar en equipo.
Tobias Altrock, de 26 años, fue despedido de la escuela por ser autista. En Auticon, una empresa berlinesa, le han dado una oportunidad. En esta empresa consultora Altrock es ahora un joven asistente que recibe el mismo salario que los demás. Auticon es una agencia que trabaja como mediadora entre autistas especializados en informática y empresas de comunicaciones.
La empresa fue fundada por Dirk Müller-Remus que abandonó su cargo de directivo en una firma de técnica sanitaria para crear Auticon. “Lo hice porque tengo un hijo autista con síndrome de Asperger que es incapaz de realizar todas las actividades cotidianas en casa pero que cuenta con enormes capacidades y talentos”, cuenta Müller-Remus, fundador de la agencia que promueve las capacidades de los autistas entre las empresas que buscan expertos.
Expertos sin “lobby”
Los fuertes de muchos autistas están, sobre todo, en el sector de control de calidad, explica el jefe de Auticon. Los autistas tienen la capacidad de pensar lógica y analíticamente. Y como la demanda de controladores de software es grande, Auticon se ha especializado en este sector.
Muchos autistas han hecho estudios universitarios de informática, y otros son autodidactas, como Tobias Altrock: “Desde que tengo ocho años me han interesado los problemas de la programación, de los computadores, de la software y de la lógica en general. Todo lo que tenga que ver con algoritmos lo hago muy bien. Es mi talento natural”.
Ayudante en cuestiones sociales
Y para que los autistas no fracasen en su entorno social en las empresas, Auticon les pone a disposición un asistente. Elke Seng es una de ellas. Ella acompaña a los autistas durante los primeros días de trabajo para analizar cuál es el ambiente más propicio: iluminación, ruidos molestos, lugar y dirección del escritorio, y preferencias en cuanto a espacios temperados o más frescos.
Los asistentes laborales de los autistas hablan también con el personal de las empresas y les explican cuáles son las características de la personalidad de un autista con síndrome de Asperger.
“Muchos le tienen miedo a los autistas porque no saben cómo tratarlos”, explica Seng. Por eso preparamos antes al personal de las empresas y les contamos que el nuevo empleado que vendrá es una persona especial en determinados aspectos”, agrega la asistente laboral de Auticon.
El éxito de Auticon es inesperado. Entretanto, cuenta con 6 asistentes laborales de planta, cantidad que se duplicará hasta fin de año. La empresa planea abrir filiales en Múnich, Düsseldorf y otras ciudades alemanas.
Con iniciativas como la de Auticon todos ganan: las personas con autismo, las empresas, la economía que aprovecha un gran potencial no explotado y el Estado que, en vez de pagar subsidios, recibe aportes en impuestos de las personas que antes consideraba “inhabilitadas”.
Autor: Insa Wrede / José Ospina-Valencia
Editora: Cristina Papaleo