¡Mujeres al volante!
10 de mayo de 2005Las calles y autopistas se han convertido en una especie de selva moderna, en la que sobrevive el más fuerte. Eso parecen pensar muchos conductores, a juzgar por la conducta que exhiben al volante. Y, en ese comportamiento selvático, los reyes son... los hombres. Un estudio de la Universidad de Würzbug confirma el aumento de la agresividad de los conductores, atribuida en parte a una simple multiplicación de la densidad del tráfico. Desde 1970 se ha triplicado en Alemania el número de auos y camniones que circulan por la vía pública. Ante esta situación, los conflictos están programados. Según el sicólogo Hendrik Caspar, experto en el tema del tránsito, "el creciente flujo de vehículos provoca crecientes agresiones".
Pecadores masculinos
Pero no todos los seres humanos dan rienda suelta por igual a esas emociones perniciosas que sentimos cuando quedamos varados en un embotellamiento o simplemente tenemos la mala suerte de ir tras un automovilista sin prisa que se resiste a permitirnos adelantar. Principalmente son los hombres los que causan problemas a los especialistas en la materia. Basta dar un vistazo al registro central de las infracciones serias de tránsito en Alemania para tener claro el panorama: de los aproximadamente 7,6 millones de conductores que han pecado contra las leyes del tránsito, 6,2 millones son hombres.
Eso no es todo. "Casi el 100% de los casos registrados de acoso en el tránsito corresponde a hombres", indica Caspar. Los últimos estudios entregan datos más específicos: los conductores más agresivos, que no guardan la debida distancia con el auto de adelante o manejan como si circularan por una pista de carrera, se ubican mayoritariamente en el segmento de entre 18 y 25 años de edad. Por el contrario, las que menos llaman la atención negativamente son las mujeres de entre 41 y 60 años.
La neurosis del viernes
También algunos caballeros que ya peinan canas provocan sobresaltos en las carreteras. "Suelen ir en vehículos caros y dan la impresión de sentirse dueños del tiempo y el espacio", comenta el sicólogo. El común de los mortales, por su parte, suele mostrarse más desconsiderado de lo habitual los viernes por la tarde. Según las estadísticas más recientes, la agresividad aumenta hasta un 400% en esos momentos en que cada uno quiere llegar en forma especialmente rápida a casa, al término de una semana de trabajo.
Las mujeres, ciertamente, no son inmunes a las neurosis clásicas de los automovilistas. Pero las cifras hablan en su favor. En consecuencia, cuando vea una mujer al volante ¡relájese! Y, si puede, sonría, que nunca viene mal.