Primer aniversario de la ampliación de la Unión Europea

Pese a los problemas que la nueva competencia está creando en el mercado laboral germano, el Gobierno y las organizaciones empresariales califican de positiva la ampliación de la Unión Europea, ya que se estima que el número de empleos relacionados con el auge de las exportaciones al este supera el de los que se han perdido por la deslocalización, sin hablar sobre consideraciones políticas y la superación de deudas históricas con sus países vecinos.

Saldo positivo para la industria

En un estudio de la Cámara de Industria y Comercio (DIHK) publicado con ocasión del primer aniversario de la ampliación se reconoce que las empresas alemanas emplean actualmente a 380.000 personas en filiales de los nuevos países miembros de la UE y que el

40 por ciento de estos empleos estaban antes en Alemania.

Pero frente a estos 150.000 puestos de trabajo perdidos aquí, el DIHK hace valer 300.000 que se han creado por el crecimiento del comercio con el este.

En el año que ha transcurrido tras la ampliación, las exportaciones alemanas a los 10 nuevos miembros han subido más del 8,5 por ciento hasta situarse en 61.000 millones de euros, mientras las importaciones se han mantenido estables.

Afectadas mediana y pequeña industria

Las empresas que más se han beneficiado de la ampliación son lógicamente las industriales, mientras en el sector de servicios, particularmente en las zonas que tienen frontera con los nuevos miembros, se notan los efectos negativos de la competencia del este.

Los diarios publican estos días reportajes de zonas fronterizas donde, como en Furth im Wald, un pueblo bávaro cercano a la República Checa, el alcalde ve alarmado cómo gasolineras, centros comerciales, casinos y prostíbulos se instalan al otro lado de la frontera -donde todo es más barato y las leyes más permisivas- y se llevan a la clientela.

Según una encuesta de la DHIK, una de cada 10 empresas medianas del sector industrial han trasladado ya parte de su producción al este y una de cada cinco se prepara a hacerlo.

A esto se suman las consecuencias de la aplicación de la directiva de servicios de la UE, que ha permitido a trabajadores del este ser contratados en el mercado alemán con el sueldo y las condiciones de su país de origen, lo que ha abierto un debate sobre la necesidad de establecer un salario mínimo en Alemania.