Secreto a voces

Un seguro de vida

Die Welt, Berlín: "Escorado debido al fracaso militar y político en el Líbano, atacado por sus evidentes debilidades como líder, amenazado y difamado por Irán y la oscura conferencia organizada por Ajmadineshad y sus igualmente oscuros negadores del Holocausto: todo ello llevó desató en Olmert un sentimiento de impotencia. Una impotencia que preocupa a toda la sociedad israelí en vista de las grandes amenazas y los débiles líderes. Por ello pudo parecerle al protegido de Sharon que colocar a Israel en la lista de países que tienen armas atómicas es como un seguro de vida."

De mal gusto

Le Monde, París: "Era desde hace décadas un secreto a voces. Pero era de buen gusto no hablar de ello. (...) La comunidad internacional intenta desde hace tres años que Irán no acceda a armas atómicas. Existe un argumento de los comienzos de la Guerra Fría que recobra actualidad ahora: que el peligro no parte de la bomba atómica en sí, sino del régimen que la posea. Si bien tiene cierto fundamento, ello es un pseudo argumento, porque refuerza la impresión de que se mide con dos varas, lo que los países emergentes no pueden soportar. Y oculta el hecho de que los únicos que han utilizado la bomba atómica hasta ahora han sido los norteamericanos."

El blanco de las amenazas el Irán

Süddeutsche Zeitung, Múnich: "El blanco de esta amenaza es en este caso el Irán. Olmert da a entender que Israel, como potencia atómica, es un fuerte adversario, al que ningún otro Estado puede borrar así sencillamente del mapa. A favor de esa interpretación habla también que el ministro de Defensa estadounidense designado, Gates, hace pocos días también calificó a Israel de potencia nuclear."

Un peso pesado en el Próximo Oriente

Frankfurter Rundschau, Fráncfort del Meno: En Berlín, Olmert dejó claro que se ve a sí mismo como un peso pesado en el Oriente Próximo. Con su crítica al ministro de RR. EE. de Alemania, Steinmeier, por la visita de éste a Siria la semana pasada y con su confirmación de que Israel posee armas atómicas, subrayó, sin importarle desatar irritaciones, el poderío de su país: Israel se ve en una línea con las potencias atómicas EE. UU., Frncia y Rusia y no se deja intimidar por Irán.