Termina el bloqueo aéreo del Líbano

El bloqueo del espacio aéreo libanés llegó a su fin oficialmente. Después de que algunos aviones lo desafiaran, quedó en evidencia para Israel la imposibilidad de sostenerlo, a menos que se estuviera dispuesto a derribar, llegado el caso, un avión de pasajeros. Por lo tanto, el gobierno de Ehud Olmert se decidió a dar el paso, aplaudido no sólo en Beirut. En cambio, el término del bloqueo naval tardará por lo visto un par de días. Según medios de comunicación israelíes, incluso habría de mantenerse hasta la llegada a la zona de unidades de Marina internacionales.

Condiciones libanesas

Según la canciller Angela Merkel, el paso dado hoy podría contribuir a despejar el camino para la misión naval con que Alemania se propone contribuir a llevar la paz a la región. Sin embargo, los escollos siguen siendo numerosos. Si bien el Líbano ya cursó la correspondiente petición a la ONU, las condiciones impuestas por las autoridades libanesas siguen siendo objeto de polémica en Berlín.

De acuerdo con las intenciones de Beirut, los navíos alemanes sólo podrían patrullar a más de siete millas de distancia de la costa. Además, el ministro de Transporte libanés, Mohammed Safadi, expuso el deseo de que "los alemanes sólo intervengan para registrar un buque cuando las fuerzas armadas del Líbano así se lo soliciten". De aceptarse tales puntos, ciertamente las fuerzas navales germanas no tendrían mucho margen de acción para cumplir la tarea prevista, que no es otra que la de evitar el suministro de armas a Hezbolá desde el exterior.

Algunos conocedores de la zona ya han hecho notar, sin embargo, que la principal vía de abastecimiento de armas de la milicia chiíta no pasa por la costa, sino por la frontera sirio-libanesa. Y allí no se podrá emplazar una tropa internacional, según subrayó el ministro italiano Massimo D'Alema. "Eso no se menciona en la resolución de la ONU, indicó el jefe de la diplomacia de Italia, país que habría de asumir la jefatura de las fuerzas de UNIFIL.

Aporte concreto

Entretanto, el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, se reunió con el primer ministro libanés, Fuad Siniora, quien precisó las condiciones que habría de tener la misión de la Marina alemana en la región. A todas luces aún habrá que conversar al respecto y se cuenta con que apenas la semana entrante se pueda someter el tema a votación en el Parlamento germano, el Bundestag. Por Ahora, Alemania se limita a enviar un equipo de especialistas en controles aduaneros para reforzar el dispositivo de control en el aeropuerto de Beirut. Se trata, por lo menos, de una primera contribución concreta en este proceso que está sufriendo tantas dilaciones.